Los hijos de Joaquín Guzmán Loera, también conocidos como Los Chapitos o Los Menores, habrían ayudado a su padre a escapar de la cárcel en el año 2015. Ovidio Guzmán, alias El Ratón, capturado el pasado 5 de enero en Culiacán, Sinaloa, mientras que el resto de sus hermanos fueron acusados por la Administración para el Control de Drogas (DEA, por su siglas en inglés) de comandar la principal facción del Cártel de Sinaloa.
Las autoridades estadounidenses los acusaron, junto con otros sujetos vinculados al Cártel del Pacífico, de ser los responsables del tráfico de fentanilo al país vecino el pasado 14 de abril. Pero fue hasta el martes 9 de mayo que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó a Joaquín Guzmán López, alias El Güero, junto con otros individuos.
Cómo Los Chapitos ayudaron al escape de “El Chapo” Guzmán
El Güero fue uno de los involucrados en el plan para que El Chapo Guzmán escapara del penal del Altiplano. Joaquín Guzmán López se coordinó con sus hermanos, con Emma Coronel y con Dámaso López Núñez, alias El Licenciado con el objetivo de ayudar al capo que actualmente está recluido, condenado a cadena perpetua, en ADX Florence, una cárcel de máxima seguridad en Colorado, EEUU.
Los involucrados participaron en una reunión en la que se pusieron de acuerdo sobre la construcción del túnel por el que eventualmente el capo logró evadir a las autoridades y conseguir su libertad.
Fue el periodista Ángel Hernández del medio Milenio, quien documentó que las seis personas también planearon la adquisición de un terreno cercano a la prisión, así como una camioneta, armas de fuego y un dispositivo para poder ubicar con precisión al Chapo. El resto de la historia es conocida, pues el capo usó un túnel que se extendía desde la regadera de la celda hasta una vivienda a las afueras del penal.
Por su parte, El Güero fue identificado como el cuarto miembro de Los Chapitos y parte de una red del Cártel de Sinaloa responsable del trasiego del opioide y otras sustancias ilícitas. “Joaquín Guzmán López está implicado en la gestión de los superlaboratorios, que a menudo han sido suministrados por una red dirigida por los hermanos Ludim y Luis Alfonso Zamudio Lerma, radicados en Sinaloa, y en el tráfico de drogas ilícitas a los Estados Unidos”.
Respecto al resto de sus hermanos, Ovidio Guzmán enfrenta un proceso de extradición a EEUU, luego de que el país vecino lo requiriera de manera formal el pasado 27 de febrero. El Ratón ha intentado detener el proceso, incluso cuando fue notificado de que las autoridades estadounidenses lo requirieron dijo “No soy la persona que ellos creen, que reclama hoy Estados Unidos”.
Mientras que sus hermanos, Iván Archivaldo, alias El Chapito y Jesús Alfredo, alias Alfredillo están prófugos y la DEA ofrece (por cada uno) USD 10 millones. Ambos están en la lista de criminales más buscados por dicha organización.
Alfredo Guzmán Salazar está relacionado con la coordinación del trafico de fentanilo a EEUU, así como en el envío de precursores químicos del opioide desde China hasta México. También, junto con su hermanos, estaría a cargo de la protección del grupo criminal, según los reportes de la DEA.
Iván Archivaldo habría sido el responsable de desatar el caos y la violencia durante la primera captura de su hermano Ovidio, la cual culmino con la liberación de El Ratón por las represalias que se originaron tras su arresto en 2019. El Chapito es identificado como uno de los miembros más silenciosos del Cártel de Sinaloa y fue producto del romance entre El Chapo y Alejandrina Salazar, su primera esposa.