De caminar en la caravana migrante a conseguir trabajo en Chiapas, así es la historia del perro Cuco

Cuco es un perro criollo que llegó a México durante las caravanas migrantes que se realizaron a lo largo del 2020 y recientemente fue inscrito como nuevo trabajador del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la dependencia dio a conocer la historia del canino por medio de un boletín informativo y un video publicado en sus redes sociales.

El can llegó a Comitán, Chiapas, hace tres años y se convirtió con el paso del tiempo en un embajador que promueve la donación de sangre en el IMSS, además de que realizar diferentes tareas como acompañar a los familiares de pacientes y vigilar el Órgano de Operación Administrativa Desconcentrada (OOAD) Norte.

El instituto dio a conocer la historia de este nuevo trabajador peludo, quien a sus seis años de edad goza de buena salud y el cariño de sus compañeros de trabajo.

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José Jenaro Olguín, jefe de Servicios y Administración de la Delegación Norte del IMSS, explicó en un boletín informativo que desde la llegada del animal lo arroparon, puesto que creyeron que sería el acompañante ideal para todas las personas que estaban esperando noticias sobre su familiar.

“Lo que habíamos hecho en la pandemia, en el hospital 24, fue que mandábamos a Cuco para que estuviera conviviendo con los familiares de los pacientes”, relató José Jenaro. Durante esta convivencia, el animal estuvo con niños que lo acariciaron en todo momento. “Así estuvo durante cuatro meses de la pandemia; también llegó más gordito porque le regalaban paletas”, aunó.

Durante esta época, Cuco “estuvo de gira” visitó los hospitales 24, 26, 41 y 48 de la zona, para ayudar a todas las personas que estaban esperando afuera de las instalaciones, esto fue de gran apoyo para ellos puesto que se relajaban mientras el perro de pelaje negro estaba ahí.

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El IMSS detalló en su boletín que el animal fue resguardado por personal mientras que la caravana siguió su camino.

Tras quedarse como “vigilante” del hospital, varios trabajadores realizaron una cooperación voluntaria para desparasitarlo, vacunarlo y adiestrarlo. En algún momento se buscó que el can fuera entrenado para detectar a personas con coronavirus, sin embargo, la edad, su olfato y raza no se lo permitieron.

“Estar vigilando en la noche, ayuda a los policías en los rondines, elimina las plagas de ratas. Está en los festivales y en las campañas de donación de sangre. Ha sido el más mediático de la delegación”, relató Jenaro Olguín sobre otras de las labores que realiza el can.

Cuco se convirtió en toda una estrella que promueve la donación de sangre y es un perro bastante consentido por la comunidad, incluso algunos trabajadores del IMSS de Chiapas lo han llegado a considerar como un símbolo de la unidad, por todo lo que aporta al equipo.

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Todos estos esfuerzos provocaron que el can fuera integrado recientemente al equipo “de manera oficial”, e incluso le crearon su propia tarjeta de empleado la cual tiene colgada en su cuello con una cadena dorada.

Dicha tarjeta de trabajador está conformada por su foto, matrícula, nombre y número de seguridad social, para que puedan identificado como un trabajador del hospital. “Lo que sí es que es 100 por ciento chiapaneco. Podemos decir que después del director general es el segundo chiapaneco más mediático en todo el IMSS”, concluyó Jenaro.