México tuvo un tercer año letal para defensores del medio ambiente con 24 activistas asesinados: CEMDA

La violencia en contra de las personas y comunidades defensoras del medio ambiente se desbordó en 2022, así lo asegura el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) a través de un informe en el que registraron un total de 24 muertes violentas de activistas y al menos 582 agresiones .

El panorama hostil no ha cambiado desde 2021, año en el que la misma organización contabilizó 108 eventos de agresión (en 2022 fueron 197), además 25 agresiones letales (cabe recordar que las cifras de ese año llevaron a México a ser considerado el país más letal para las y los defensores, según Global Witness).

Entre las acciones más recurrentes en contra de los activistas se encuentra la intimidación, hostigamiento, amenazas y agresiones físicas. Asimismo CEMDA detectó que en 2022 se mantuvo la tendencia de estigmatización y criminalización en contra de los grupos de defensa del medio ambiente.

Además también se registraron detenciones arbitrarias, despojos, uso indebido de la fuerza difamación, y 9 desapariciones de las cuales al menos 2 fueron perpetradas por elementos del Estado.

El sector minero es en donde se detectaron más actos violentos relacionados. Respecto a las muertes violentas, las entidades con más casos son Guerrero, Chihuahua, Oaxaca y Puebla.

En México, 24 activistas fueron asesinados, sus muertes, como señala en documento emitido por CEMDA, están relacionadas con su labor de defensa ambiental de la tierra y el territorio.

En Guerrero, específicamente en Chilapa de Álvarez, se documentaron 4 casos, se trata de las muertes de Lorenza Chantzin Paxacuasingo, Marcos Campos Ahuejote, Nicolás Pérez Xoyateco y Alberto Morales Sebastián.

Lorenza y Marcos realizaban labores en contra del despojo de sus territorios ante la actividad minera en la región, ambos desaparecieron el 6 de mayo de 2022, al día siguiente, sus cuerpos sin vida fueron localizados, abandonados en un tramo carretero. Las autoridades señalaron que habrían muerto en un accidente automovilístico; sin embargo, habitantes de la localidad han rechazado ésta versión.

Nicolas, indígena nahua, integrante de la Asamblea del CIPOG-EZ y Coordinador del Comité de Agua Rural, fue asesinado por un ataque con arma de fuego el 24 de julio de 2022.

Alberto Morales, miembro de la comunidad nahua de Tula, en Chilapa de Álvarez e integrante de la Asamblea del CIPOG-EZ, fue asesinado con arma de fuego el 9 de julio. Los habitantes de la región han atribuido las cuatro muertes a “Los Ardillos”, una célula criminal con fuerte presencia en la zona.

En Chihuahua se registraron tres asesinatos. José Trinidad Baldenegro López, defensor rarámuri murió el 7 de marzo, iba saliendo de su casa rumbo al trabajo cuando fue atacado a balazos.

Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar —sacerdotes de la comunidad de Cerocahui, en Urique— fallecieron por lesiones de arma de fuego dentro de la parroquia en la que predicaban. Ambos apoyaban las causas comunitarias de la región así como en la defensa del territorio.

Dos casos más se vivieron en Jalisco, el primero en febrero, mes en el que Verónica Patricia Guerrero Vinueza, abogada ambientalista, integrante y representante legal del Colectivo de Vecinos Urbi Quinta, fue asesinada. Ya había denunciado diversas amenazas antes de su muerte.

El segundo fue el de Rosendo González Torres, médico tradicional e integrante del pueblo indígena wixárika, se había posicionado en contra del despojo del territorio para actividades ganaderas y mineras. Fue asesinado junto a su nieto de 17 años y sus cuerpos fueron abandonados en una barranca.

En Michoacán, Noé Godínez Arredondo (defensor ambiental y del territorio, y representante de bienes ejidales en San Francisco, Uruapan) y Pedro Pascual Cruz ( defensor purhépecha de los bosques de Ocumicho), fueron víctimas de una agresión con arma. Los hechos se registraron en mayo y diciembre respectivamente.

Francisco Vázquez Domínguez, defensor del agua, fue asesinado en febrero mientras trabajaba en el campo. Dos meses después, Héctor Soto Rodríguez, abogado agrarista, fue ultimado. Los dos casos se registraron en Morelos.

En Oaxaca, Filogonio Martínez Merino y Jesús Manuel García Martínez perdieron la vida luego de ser atacados con arma de fuego. El primero era defensor del agua y del medio ambiente y contaba con medidas de protección. Jesús Manuel falleció en octubre cuando un grupo armado atacó la casa en la que vivía.

Jesús Bañuelos Acevedo fue asesinado en Hidalgo en el marco de una protesta en contra del basurero de Atitalaquia. Antonio de la Cruz era conocido como “El reportero del campo” en Tamaulipas, fue atacado en junio cuando salía de su domicilio.

De las 24 muertes, según el reporte de CEMDA, 7 estarían relacionadas con la actuación de elementos del Estado y fueron documentadas en Oaxaca, Puebla y Guerrero.

Mayolo Quiroz Barrios, el defensor desapareció la madrugada del 10 de octubre de 2021 cuando se disponía a cuidar su ganado.En enero de este año fueron localizados sus restos en un paraje de Oaxaca. Se ha señalado la presunta participación de la policía de San Esteban Atatlahuca en los hechos.

Marcelo Carrera Reyes, Teofilo Barrera, Omar Herrera Raymundo, eran defensores nahuas de la comunidad de Coyomeapan en Puebla. Se presume que habrían muerto a manos de la policía estatal.

En Guerrero se dieron las muertes de Moisés Cuapipistenco, Guillermo Hilario Morales, Adán Linares Silverio. Las probables ejecuciones extrajudiciales perpetradas contra los tres defensores se desarrollaron el sábado 5 de noviembre, en la cabecera municipal de Chilapa de Álvarez.

Según el comunicado del CIPOG-EZ, los tres defensores fueron detenidos por presuntos agentes de Tránsito Municipal, quienes los llevaron a un lugar desconocido.