El incendio en una estancia provisional de Ciudad Juárez evidenció las carencias en materia de derechos humanos y protección civil respecto a la actuación del personal del Instituto Nacional de Migración (INM).
Dicha tragedia, además de ocasionar la muerte de 40 personas migrantes, puso en la mira de las autoridades, por primera vez, a un titular del Instituto por el incumplimiento de sus obligaciones.
Como parte de las indagatorias emprendidas por la Fiscalía General de la República (FGR), no sólo quedó asentada la aparente responsabilidad de Francisco Garduño Yáñez —comisionado de Migración— en el lamentable incidente, sino que también se dio a conocer un hecho similar ocurrido en 2020.
“En la investigación de antecedentes, se encontró que, el 31 de marzo de 2020, se dio en otro centro migratorio del INM, en Tenosique, Tabasco, un caso semejante, dando como resultado una persona muerta y 14 lesionados”, expuso la corporación en un comunicado.
De acuerdo con un recuento de acontecimientos elaborado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), en esa fecha hubo una protesta al interior de la Estación Migratoria de Tenosique debido al hacinamiento que las personas en situación de movilidad sufrían dentro de las instalaciones.
En el área de varones, varios migrantes comenzaron a exigirle al personal del INM que los dejaran salir y coordinaran el retorno a sus países de origen, pues el encierro al que los habían sometido los ponía en alto riesgo “debido a la contingencia sanitaria por Covid-19″.
Pese a las reclamaciones, las autoridades del INM no ofrecieron respuesta alguna. Ante tal escenario, algunos de los migrantes le prendieron fuego a las colchonetas del interior de la estación. Según los testimonios de los sobrevivientes de aquel día, los trabajadores de Migración “los encerraron en las instalaciones mientras que el incendio aumentaba”.
A causa del siniestro murió un hombre originario de Guatemala, quien de acuerdo con la información oficial, había llegado a México para solicitar la condición de refugiado. Fue detenido junto con su esposa, su hijo, su nuera y su hermano.
Además de este sensible fallecimiento, al menos 13 personas resultaron heridas y afectadas por intoxicación, por lo que tuvieron que ser trasladadas a hospitales de Tenosique y Villahermosa.
“Las personas migrantes somos las más afectadas, pudimos vivirlo con la pérdida de uno de nuestros compañeros, algo que sin necesidad alguna ocurrió por negligencia de las autoridades encargadas, en parte por carecer de protocolos en caso de incendios y por habernos encerrado en las instalaciones mientras el fuego se incrementaba”, fue el testimonio de uno de los sobrevivientes, retomado por Mario Marlo para ZonaDocs.
Por esta situación, la CNDH emitió una recomendación y le pidió a Francisco Garduño que, en coordinación con la Comisión de Atención a Víctimas, brindara “la reparación integral a las víctimas, que incluya la atención psicológica, médica y asesoría jurídica” necesarias.
Además, la Comisión pidió la colaboración del funcionario para instruir a todas las estaciones migratorias y estancias provisionales de Tabasco que tuvieran disponible personal médico y psicológico en todo momento para atender cualquier posible emergencia sanitaria o crisis nerviosa ocasionadas por la pandemia de Covid-19.
Aunque no hay registros de que dicha tragedia haya sido motivo para el inicio de un proceso penal contra Francisco Garduño, el aún comisionado del INM tendrá que comparecer ante las autoridades el próximo 20 de abril en una audiencia, en la que la FGR lo imputará por incumplir con sus obligaciones de vigilar, proteger y dar seguridad a las personas e instalaciones a su cargo, pues su conducta omisa habría propiciado los 40 homicidios y las 25 lesiones derivadas del incendio.