Cuál el origen del jabón Zote, un clásico en la limpieza de los hogares mexicanos

Un inconfundible aroma se ha arraigado tanto en la ropa de las y los mexicanos como en sus propios hogares durante décadas. Y es que, al entrar a cualquier centro de lavado es común encontrar una barra de jabón de color rosa o blanco con la leyenda “Zote” impresa en una de sus caras.

Aunque recientemente el popular jabón se volvió tendencia entre usuarios de redes sociales, lo cierto es que el jabón Zote se ha consolidado con el paso de los años como uno de los productos de limpieza favoritos de las y los mexicanos no solo gracias a su económico precio en el mercado sino también a su efectividad y múltiples usos.

El éxito de aquella peculiar barra de jabón ha sido tanto que ahora no solo figura en los estantes de los supermercados o tienditas de la esquina sino que incluso se ha vuelto parte de la cultura mexicana, de modo que se ha llevado su representación a otros artículos fuera de la limpieza del hogar entre los que destacan bolsas, accesorios, playeras e incluso aretes.

De acuerdo con información compartida en el portal web del jabón Zote, el origen del detergente se remonta a la fábrica La Corona, la cual fue fundada por el empresario Esteban González Padilla, a quien se le atribuye la creación de la popular barra de jabón.

Fue en 1970 cuando fue lanzado por primera vez al mercado como un producto de limpieza de excelente calidad, buen precio y gran tamaño en comparación de los detergentes que circulaban en la época y que en su mayoría eran de origen extranjero.

Además del divertido juego de palabras con el que fue creado, los múltiples usos que se le comenzó a dar al jabón Zote propiciaron a que rápidamente se convirtiera en un producto indispensable en los hogares mexicanos.

Según lo expuesto en un artículo del sitio web México Desconocido, en un inicio el proceso de fabricación de las barras de jabones era casi manual, no obstante, actualmente su producción se ha masificado aunque aún conservan su fórmula original.

Sorprendentemente, los ingredientes que contiene el jabón Zote son aceite de coco y sebo de res aunque su inconfundible y fresco olor se le atribuye al aceite esencial de citronela.

Aunque el jabón Zote se ha popularizado entre la sociedad mexicana, lo cierto es que ha hecho poco uso de la publicidad en medios de comunicación como la televisión; basta con su tradición y calidad para ser unos de los jabones más vendidos en el país.

De acuerdo con información de México Desconocido, el mercado del jabón Zote se ha expandido hasta otros territorios pues al menos el 15% de su producción llega al mercado sudamericano y estadounidense.

Aunque la presentación más popular del jabón Zote es la barra rosa o blanca que la mayoría de las y los mexicanos conocen, su producción también se ha innovado para crear un detergente líquido con las mismas propiedades pero enfocado más al uso de lavandería.

Por su parte, las barras de jabón son ideales para el lavado de prendas, trapos o jergas a mano ya que en un inicio fue creado para personas de escasos recursos que no tenían acceso a electrodomésticos como una lavadora.

Además de la limpieza para el hogar, de forma extraoficial y no comprobada al jabón Zote se le han dado otros usos entre los que destacan: carnada para pesca, tratamiento contra el acné, la caspa o la caída de cabello, repelente de insectos, lavado automóvil, reparador de fisuras y goteos, insecticida de plantas, entre muchos otros.

Pese a ello, aunque no han trascendido casos de intoxicaciones u hospitalizaciones como resultado de su aplicación, el uso en seres humanos o animales no es recomendado.