Los padres de Debanhi Escobar han convocado a un mitin para exigir justicia por la desaparición y feminicidio de la joven que en abril del 2022 fue encontrada sin vida dentro de una cisterna del Motel Nueva Castilla en Nuevo León.
Fue a través de la cuenta de Instagram de la joven (y gestionada por sus padres) donde hicieron un llamado a reunirse en el Palacio de Gobierno, en Monterrey, a las 14:00 horas del próximo 21 de abril - fecha en la que justamente habrá transcurrido un año del crimen que hasta ahora no se ha esclarecido.
“Casi un año y no descansaremos hasta encontrar la verdad. Te amamos hija. ¡21 de Abril jamás será olvidado!”.
Y es que el pasado 21 de marzo, Mario Escobar y Dolores Bazaldúa afirmaron que los avances en la investigación por el caso de su hijo han sido lentos, pese a la intervención de la Fiscalía General de la República (FGR).
Sin embargo, reconocieron que ésta ha contribuido a “cerrar eslabones” que la Fiscalía General del Estado (FGE) neoleonesa no había podido.
“Se han encontrado algunos avances, vamos lentos pero pues vamos tranquilos, vamos seguros”, manifestó Mario Escobar.
Actualmente, las pesquisias se centran en el Motel Nueva Castilla del cual, según sospechas de sus padres, Debanhi jamás salió desde su desaparición el 9 de abril del 2022. Al lugar lo han rodeado las inconsistencias desde el hallazgo de la estudiante de derecho hasta el actual 2023, cuando se reveló una irrupción en el motel a pesar de que está bajo custodia de la FGE.
“Vimos que habían estado abiertas todas las puertas del mismo y en ese sentido nosotros interpusimos la denuncia”, declaró el padre de Debanhi.
Tras la denuncia, la Fiscalía de Nuevo León realizó peritajes durante la segunda y tercera semana en todo el Motel Nueva Castilla; cuyos resultados arrojaron indicaron que se cometió robo en algunas de las habitaciones.
“Las periciales correspondientes no dentro del área donde encontramos a Debanhi, sino que en todas las habtiaciones, qué fue lo que se robaron”, señaló.
“Es increíble que de alguna manera hayan entrado y hayan violentado una escena del crimen”.
Según lo dicho por Mario Escobar, fue en febrero pasado cuando se le notificó de un aparente robo a las habitaciones del sitio, específicamente de la 130 a 150. Los indicios también apuntaron que las puertas fueron forcejeados.
“Estamos viendo que el resguardo no es totalmente seguro porque en las alas de los dos lados están abiertas las habitaciones y se supone que están cuidando, vimos que está una patrulla cuidando en la parte de enfrente, pero no sabemos quién abrió las puertas y con qué fin”, señaló Dolores Bazaldúa por su parte.