El empresario Carlos Slim debutó en la lista de hombres más ricos del mundo de Forbes en 1991 y en 1994 fue clasificado como el más acaudalado de México. Aunque su posición a nivel mundial cambia constantemente, su dominio en la economía mexicana se mantiene.
Slim lleva casi veinte años con el título del hombre más rico de México, el cual obtuvo después de que su fortuna incrementó exponencialmente tras comprar al gobierno Teléfonos de México (Telmex) en 1990.
Sin embargo, antes de que Slim se consolidara en esta posición durante los años 90, hubo una familia mexicana que ingresó a la lista de Forbes en la década anterior y que estuvo posicionada como la más acaudalada a nivel nacional: los Garza Sada.
Esta familia ingresó al listado de millonarios de Forbes en 1987 con una fortuna de USD 2 mil millones, cuando estaba al frente de los negocios Eugenio Garza Lagüera, quien tomó el liderazgo luego de la muerte de su padre Eugenio Garza Sada (1892-1973).
Garza Sada fue el que consolidó la fortuna familiar con la Cervecería Moctezuma, el negocio que su padre Isaac Garza Garza comenzó en 1886 y en el que se involucró desde 1916 tras terminar sus estudios universitarios en el Tecnológico de Massachussets (MIT), en Estados Unidos.
Además de favorecer el crecimiento de la productora de cervezas, impulsó la empresa Valores Industriales (VISA), precursora de Fomento Económico Mexicano S.A.B. de C.V (FEMSA). Es reconocido también por ser fundador del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), una de las escuelas de educación superior con mayor prestigio en la actualidad.
Garza Sada murió a los 81 años durante un fallido secuestro orquestado por Liga Comunista 23 de Septiembre. El empresario fue interceptado por la mañana del 17 de septiembre de 1973 mientras iba en camino a las oficinas de Cervecería Cuauhtémoc en compañía de dos guardaespaldas.
Antes de que Garza Sada consolidara Cervecería Cuauhtémoc y llevara a su familia a ser considerada como la más rica de México, la fortuna más grande del país pertenencia a un empresario estadounidense llamado William O. Jenkins.
O. Jenkis logró su riqueza con la producción de azúcar y la industria textil. Su trayectoria en este último sector comenzó en 1905 cuando montó su primera fábrica en el estado de Puebla, cuatro años después de que llegó a México para conocer Monterrey, Nuevo León.
El estadounidense aprovechó el estallido de la Revolución Mexicana para comprar terrenos a bajo costo, entre ellos haciendas y mansiones. Además de aprovechar la situación para adquirir propiedades, hizo una gran cantidad de dinero al dar préstamos con una alta tasa de interés.
Su historia en la industria azucarera comenzó en Puebla también, cuando ya era reconocido por su gran fortuna. Compró todas las plantaciones de caña de azúcar del poblado de Atencingo y con ello consiguió incrementar su riqueza.
Una vez consolidado su monopolio textil y azucarero, Jenkins incursionó en el sector financiero con la adquisición de Banco del Comercio (Bancomer), la institución financiera más importante de la época.
Tras la Revolución Mexicana fue reconocido por respaldar a políticos como los hermanos Maximino, Manuel y Rafael Ávila Camacho, miembros del partido antecesor al Revolucionario Institucional (PRI) mediante préstamos personales.
Poco se sabe del destino que tuvo su fortuna después de su muerte en 1963. Caso contrario al de la familia Garza, que en la actualidad está inmersa en la economía mexicana a través de FEMSA, que participa en la industria de las bebidas y en las tiendas minoristas a través de OXXO. Al frente de la familia Garza está Eva Gonda, viuda de Eugenio Garza Lagüera. La empresaria ha sido incluida también en la lista de Forbes.