La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) publicó un documento en el que dirigió una recomendación al titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, por los hechos ocurridos en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
“CNDH dirigió la Recomendación 95VG/2023 al titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), general Luis Cresencio Sandoval González, por las violaciones graves a los derechos humanos, a la vida, a la seguridad jurídica e integridad personal, por uso excesivo de la fuerza mediante el uso ilegítimo de armas de fuego, que resultó en la muerte de cinco personas”, se pudo leer en el mensaje compartido durante el martes 21 de marzo.
Las víctimas fueron seguidas por 21 servidores públicos en cuatro vehículos oficiales y un miembro militar usó su arma de fuego para disparar contra el vehículo de los afectados “sin que mediara una amenaza real”.
De igual manera, la CNDH detalló que no había armas en la unidad donde iban las víctimas y que ni los soldados ni las unidades oficiales resultaron dañadas por disparos de arma de fuego. Además, los militares aseguraron que ninguno observó que del vehículo particular se hubieran realizado detonaciones.
Asimismo, el organismo enfocado en la protección de derechos humanos solicitó que el titular de la Sedena colabore con la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) para la inscripción en el Registro Nacional de Víctimas de los siete individuos afectados, así como a sus familiares, para que se inicie con la reparación del daño.
“También se le pide que colabore ampliamente en la presentación y seguimiento de la denuncia administrativa que esta Comisión Nacional presente ante el Órgano Interno de Control en la SEDENA en contra del personal que sin justificación legal alguna accionó sus armas de fuego en agravio de las siete víctimas directas”, compartió la CNDH.
La ONU también se pronunció por las muertes en Nuevo Laredo
El pasado 2 de marzo, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) solicitó a las autoridades mexicanas una investigación pronta e imparcial por la muerte de cinco personas debido al uso letal de la fuerza por parte de elementos de la Sedena.
De igual manera, la ONU indicó que el uso de armas de fuego debe ser el último recurso y que todo deceso relacionado con militares debe ser investigado de forma independiente.
Ante los hechos ocurridos en Nuevo Laredo, la Sedena señaló que los uniformados dispararon tras escuchar un estruendo. “De esta situación, al escuchar un estruendo, el personal militar accionó sus armas de fuego; suceso que actualmente diversas autoridades se encuentran investigando para determinar la veracidad de los hechos”, compartió la institución militar.
De acuerdo con la versión de la Sedena, los uniformados vieron un vehículo tipo pick up que llevaba a siete personas e iba a exceso de velocidad, sin placas y con las luces apagadas el cual se terminó impactando otra unidad estacionada.
Secuestro y muerte de ciudadanos estadounidenses en Tamaulipas
En Tamaulipas también ocurrió el secuestro de cuatro ciudadanos estadounidenses, dos de los cuales fueron hallados muertos posteriormente.
Durante la noche del domingo 5 de marzo, el Buró Federal de Investigación (FBI, por su nombre en inglés) informó que solicitaba ayuda para identificar a los responsables del secuestro, cabe destacar que fue dicha institución la que confirmó que se trataba de personas de EEUU y además ofrecía una recompensa de 50 mil USD.
Las víctimas fueron identificadas por la prensa estadounidense como Latavia Tay McGee, Shaeed Woodard, Zindell Brown y Eric James Williams. El hallazgo y deceso de los cuerpos fue informado por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) durante una conferencia matutina del 7 de marzo.