Beatriz Gutiérrez Müller condenó las expresiones de violencia en contra de las mujeres en la política, luego de que durante el mitin en el Zócalo el pasado sábado 18 de marzo se quemaron figuras de la ministra Norma Piña Hernández.
Sin mencionarla directamente, la escritora se solidarizó con las mujeres víctimas de “vejación a sus personas o imagen, o las de sus hijos”, pues aseguró que también ha sido víctima de ello, por lo que pidió detener la violencia.
“No convertir la libertad en libertinaje es clave para vivir y convivir en un país plural y democrático como el nuestro. Mi apoyo a todas las mujeres de la política (o circunstancialmente cerca de esta) ante la vejación a sus personas o imagen, o la de sus hijos. Lo he padecido tanto, ¿cómo no solidarizarme? Subamos el nivel. No violencia. Más amor urgentemente”, escribió a través de su cuenta de Twitter.
Y es que durante la congregación a la que AMLO convocó en la explanada de la Constitución de la Ciudad de México —en conmemoración de al Expropiación Petrolera— simpatizantes de Morena prendieron fuego a una figura de cartón que representaba a la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Por su parte, la senadora Olga Sánchez Cordero, quien fue la primera mujer en estar al frente de la Secretaría de Gobernación, desaprobó la “intolerancia”. “Conozco a la ministra presidenta Piña desde hace 25 años, pues fue mi secretaria de estudio y cuenta en la SCJN. Independientemente de esto, las muestras de intolerancia hacia su persona y hacia la institución que representa son inadmisibles. La violencia nunca es la respuesta”.
La acción también fue lamentada por otras personalidades políticas, principalmente por opositores al movimiento de la Cuarta Transformación quienes en redes sociales posicionaron el hashtag #NoEstásSola. La senadora por Movimiento Ciudadano, Patricia Mercado, acusó que el no condenar la violencia era expresar el permiso para ejercerla.
“La expresión de odio que sucedió ayer en el Zócalo hacia la primera mujer presidenta de la SCJN, la ministra Norma Piña, debe marcar un límite. La condena tiene que ser unánime, porque de lo contrario lo que se expresará es un permiso para violentarla”, compartió la ex candidata presidencial en 2006.
Por su parte, el dirigente nacional del Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Alito Moreno, también expresó su solidaridad con la titular del Poder Judicial. “La violencia política y de género no deben pasar por alto, más aún cuando la polarización y el discurso de odio sean impulsados desde el Poder”, expresó.
Asimismo, el líder de Acción Nacional (PAN) reprobó la acción. “El discurso de odio y polarización de López Obrador ha llegado demasiado lejos. Que les quede muy claro, ¡no se puede condenar a quien piensa distinto! ¡Ya basta!”, redactó.
“Ministra, estamos contigo millones de mexicanos que no queremos a un mentecato en el Gobierno. Debemos tener un Zócalo y una CDMX en donde nuestra bandera brille para todos. Una bandera que refrenda la justicia. Por ello, Norma Piña: No estás sola, somos muchos contigo”, se sumó Kenia López Rabadán, vicecoordinadora del PAN en el Senado.
Por su parte, el senador Emilio Álvarez Icaza exigió que AMLO se haga cargo de las consecuencias “que genera la violencia política de género y misoginia que emite todos los días contra la ministra Norma Piña. Sus fanáticos lo toman como orden”.
Entre tanto, el evento conmemorativo por los 85 años de la Expropiación Petrolera congregó a 500 mil personas, de acuerdo con cifras del Gobierno de la Ciudad de México. Durante el evento, algunos asistentes gritaron la consigna: “¡Fuera Piña, fuera Piña!”.
Los roces entre López Obrador y Piña Hernández comenzaron desde que la ministra fue nombrada presidenta de la SCJN. Fue durante la ceremonia conmemorativa de la Constitución Política que Norma Piña se quedó sentada durante la entrada de AMLO al recinto, lo que fue considerado como una falta protocolaria por los simpatizantes del presidente.
Además, diversos morenistas han condenado el hecho de que, con el arribo de Piña Hernández, jueces liberaron sentencias a favor de políticos opositores a AMLO, como la anulación de la orden de aprehensión en contra del ex gobernador Francisco García Cabeza de Vaca.