El ex gobernador de Quintana Roo entre 2011 y 2016, Roberto Borge Angulo —emanado de la filas del Partido Revolucionario Institucional (PRI)— fue vinculado a proceso acusado de delincuencia organizada, luego de su aprehensión en 2017. No obstante, como él, varios mandatarios estatales priistas han sido encarcelados por crímenes cometidos durante sus gobiernos.
La mayor parte del gobierno de Borge Angulo ocurrió cuando un priista ocupaba la presidencia de México: Enrique Peña Nieto (2012 - 2018). Al mismo tiempo, diversas gobiernos estatales de México estaban ocupados por el partido tricolor. Y, coincidentemente, al día de hoy cuatro gobernadores del PRI, de ese periodo, están en prisión, más otros tantos.
Al término de su administración, fue señalado por diversas irregularidades en las finanzas del Estado. Tras la realización de fiscalizaciones y, en el marco de reportajes que acusaron el presunto desvío de recursos, en junio de 2017 le fue girada una orden de aprehensión.
Tras ser detenido en Francia en 2017 y extraditado a México, el ex gobernador quintanarroense actualmente enfrenta otros tres procesos penales, por lo que se encuentra recluido en el Centro Federal de Rehabilitación Psicosocial de Morelos.
Mario Villanueva Madrid
El también ex gobernador de Quintana Roo, entre 1993 y 1999, fue de los primeros gobernadores del México contemporáneo que pisó la cárcel. Fue capturado en 2001 en Estados Unidos, y extraditado a México en 2010, donde fue juzgado por crímenes como lavado de dinero, asociación delictuosa y delitos contra la salud.
En 2013 fue condenado a 17 años de prisión por los delitos mencionados, por lo que fue encerrado en el Penal del Altiplano, en Almoloya de Juárez. En 2020 se le concedió prisión domiciliaria, la cual le fue revocada tiempo después y regresó a prisión. Fue señalado de presuntamente otorgar protección durante su gobierno a Amado Carrillo Fuentes, El señor de los cielos.
Tomás Yarrington
Gobernó Tamaulipas de 1999 a 2004. En 2012 la Agencia de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) acusó que el político priista estaba vinculado con el Cártel de los Zetas y el Cártel del Golfo, así como que había lavado tres millones de dólares y fue cómplice de diversos homicidios.
El PRI le revocó su militancia y fue prófugo de la justica hasta abril de 2017, cuando fue detenido en Florencia, Italia. En 2012 se declaró culpable de lavado de dinero y recepción de sobornos por parte del crimen organizado. Recientemente fue condenado a 9 años de prisión por un juez de Estados Unidos.
Javier Duarte
Duarte de Ochoa llegó al gobierno de Veracruz en 2010, y con el arribo de Peña Nieto a la presidencia de México, fue considerado como parte del “Nuevo PRI” que promocionó el mandatario federal. Sin embargo, la gestión de Duarte significó una de las peores crisis económicas en la entidad, de acuerdo con la Universidad Veracruzana, además de que fue marcada por escándalos de corrupción y el asesinato de periodistas.
En octubre de 2016, al término de su administración, fue emitida una orden de captura en su contra por delincuencia organizada y operación con recursos de procedencia ilícita. Fue detenido en abril de 2017 en Guatemala y extraditado a México meses después. En septiembre de 2018 se declaró culpable de operación con recursos de procedencia ilícita y asociación delictuosa con el fin de reducir su condena.
En la actualidad se encuentra preso en el Reclusorio Norte, donde enfrenta un proceso más por desaparición forzada.
César Duarte
Duarte Jáquez gobernó Chihuahua durante el mismo periodo que Duarte de Ochoa (de 2010 a 2016). En su gestión fue señalado por retener salarios de sus empleados para financiar al PRI, así como de tener una “nómina secreta” para sobornar a otros políticos y periodistas.
Javier Corral, cuando ganó la gubernatura del estado en 2016, prometió perseguir a Duarte por su corrupción. En marzo 2017, en el marco de la detención de diversos funcionarios de su gobierno, fue emitida una orden de aprehensión contra el priista, por lo que fue capturado en mayo de ese año en Estados Unidos y extraditado a México en 2020, donde está acusado de peculado agravado y asociación delictuosa.
Asimismo, otros gobernadores del PRI que llegaron a prisión fueron Andrés Granier, quien gobernó Tabasco entre 2007 y 2012, detenido y encarcelado por agravado, así como Roberto Sandoval, quien mandó en Nayarit de 2011 a 2017 y actualmente enfrenta cuatro procesos por delitos electorales y vínculos con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).