Autoridades federales y del Estado de México arrestaron a un chico de 14 años apodado “El Chapito” por el asesinato de ocho personas cerca de Ciudad de México, en crímenes relacionados con narcotráfico, informó la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
El joven presuntamente se acercó en una moto y abrió fuego sobre una familia en el municipio de Chimalhuacán, al oriente de la capital mexicana. Otro hombre fue arrestado por los asesinatos del 22 de enero y siete miembros del grupo criminal fueron acusados de delitos relacionados con drogas.
Las víctimas estaban en una fiesta, aparentemente de cumpleaños, cuando se produjo el ataque, que también dejó cinco adultos y dos niños heridos.
No se dio a conocer el nombre del joven arrestado por ser menor de edad. Sin embargo, si se dio a conocer su apodo, que claramente alude al capo narco Joaquín “El Chapo” Guzmán, preso en Estados Unidos.
Tampoco se ha revelado el motivo de los homicidos, pero las pandillas en México suelen dedicarse también a los secuestros y asesinatos a sueldo. También matan a los rivales que venden drogas en su territorio o a personas que les deben dinero.
Los otros implicados fueron identificados como Luis Raúl “N”, “El Ñoño” y Said “N”, Erika Patricia “N”, Lesly Karina “N”, Brandon Yael “N”, Jesús “N”, Jonathan Emmanuel “N”, Julio “N”, y Luis Enrique “N”.
El operativo estuvo a cargo de elementos de la Fiscalía Especializada de Homicidio de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), la Comisión para la Atención del Delito de Homicidio Doloso (CONAHO) y la Coordinación Nacional Antisecuestro (Conase).
El líder de la banda, identificado como Leonardo “N”, alias “El Lenguas”, de 28 años, ya fue capturado, informaron las autoridades.
El caso del “Ponchis”
Una mañana de 2010, los vecinos de Topilejo fueron testigos de la irrupción de varios elementos del Ejército mexicano, provenientes de la vigésimo cuarta zona militar, con sede en Cuernavaca, Morelos, a una zona donde anteriormente habían sido vistos vehículos sin placas y hombres con armas.
Los militares estaban ahí para confirmar si un niño de 14 años, apodado “El Ponchis”, había sido el responsable de la muerte de cuatro personas que fueron degolladas y sepultadas en la zona de Topilejo.
En México, todos recuerdan a Édgar N. alias “El Ponchis”, un niño involucrado desde los 11 años con la delincuencia organizada, quien tras su detención en 2010 confesó haber asesinado a cuatro personas por órdenes de un mando del Cártel de Sinaloa apodado “El Negro” Hernández Radilla, un militar desertor que juró lealtad a Joaquín “El Chapo” Guzmán.
En un video difundido en YouTube se vio a “El Ponchis” cortando el cuello de una de sus víctimas, en otro se le ve golpeando a un hombre y en otro más al lado de un cadáver, según fuentes militares.
A Édgar nunca le gustó la escuela y sus “maestros” fueron las malas compañías y las drogas. A los 11 años llevó a cabo su primer asalto a un negocio y fue detenido. Es originario de San Diego, California, Estados Unidos. Creció en un ambiente sórdido y con poco amor por parte de sus padres, quienes más de una vesz fueron arrestados por tráfico de drogas.
Los delitos que le imputaron a “El Ponchis” fueron por posesión de armas de fuego exclusivas del Ejército y participación en secuestros, torturas y homicidios. Lo condenaron a tres años de cárcel, los cuales cumplió en noviembre de 2013, cuando fue liberado en medio de un gran despliegue de seguridad, custodiado por policías estatales y federales para evitar un posible atentado contra el menor, que sabía demasiado sobre el también llamado Cártel del Pacífico.
Fue trasladado al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) para de ahí llevarlo el 3 de diciembre de 2010 a los Estados Unidos.