El Congreso de Jalisco aprobó que se castigue con entre 2 y 15 años de prisión a quienes ataquen a una mujer con ácido o alguna sustancia corrosiva, cáustica, tóxica o inflamable.
Este 14 de marzo los diputados locales votaron a favor por la reforma propuesta en mayo del 2022 por Dolores López Jara de Movimiento Ciudadano (MC) y presidenta de la Comisión de Igualdad Sustantiva. Se modificará la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y el Código Penal del Estado para integrar el castigo a los agresores.
La votación a favor fue unánime, pues los 34 legisladores y legisladoras votaron a favor de la reforma. De acuerdo con López Jara, endurecerá las sanciones contra los agresores de mujeres que usan sustancias que las dejan marcadas de por vida.
“Se trata de que los ataques con sustancias corrosivas puedan ser un delito independiente, que se castiguen por separado, no como lesiones simples o agravadas. Quien hace este tipo de agresiones es bajo una conducta sumamente premeditada, va y compra algo para dañar, no sólo es agresión física, sino que busca ejercer un daño permanente”, señaló la diputada emecista.
Añadió que al ser agresiones intencionales incluso podrían ser considerados como violencia terrorista, ya que también son usados para causar miedo.
Cuando el ataque ocurra por razones de género entre el agresor y la víctima, y cuando exista una relación de parentesco consanguíneo, afinidad, civil, concubinato, noviazgo o cualquier otra relación de convivencia, laboral o docente, la pena será aumentada hasta un tercio. Por ejemplo, si el agresor tuvo una relación sentimental con la víctima la pena pasaría a 20 años; 5 años adicionales.
Asimismo, los cambios legislativos establecen que el sistema de salud brinde atención a las victimas de este tipo de ataques ácidos y que se inicie el registro de compradores de esos productos químicos.
“Estamos proponiendo un protocolo de atención, porque no lo hay. Así es, también se exige un registro de quienes adquieren este tipo de productos. Son todos aquellos que puedan causar daño. Había incluso la disyuntiva que fuera un ácido y que pudiera ser una salsa picante. No. Estamos hablando de sustancias corrosivas, tóxicas, inflamables y las agravantes son cuánto más sea”, añadió la legisladora.
Según la diputada, esta reforma, a diferencia de la analizada en el Congreso de la Unión, en lo local no se consideró como tentativa de feminicidio, pero negó que se haya suavizado la pena para ser aprobada, asegurando que es un avance mientras se hace la modificación federal con la cual se hará una homologación.
Antes de que la iniciativa fuera aprobada en el estado de Jalisco las agresiones con agentes corrosivos eran clasificados como lesiones en general, por lo que no eran procesadas penalmente o eran subestimados al ser calificados como conductas no graves.
La adición en el Código Penal de Jalisco, la cual deberá ser publicada oficialmente para entrar en vigor, quedó de la siguiente manera:
“Artículo 212 Bis. Se impondrá de dos a quince años de prisión al que, por sí o por interpósita persona, ataque a otra utilizando para ello ácidos, sustancias químicas corrosivas o cáusticas, que genere lesiones internas, externas o ambas, sin perjuicio de las sanciones que se apliquen por la comisión de otros delitos.
“Cuando el ataque se cometa por razones de género y entre el activo y la víctima exista o haya existido una relación de parentesco por consanguinidad, afinidad, civil, concubinato, noviazgo o cualquier tipo de relación sea de convivencia, laboral o docente, la pena se aumentará hasta un tercio, es decir hasta 20 años”.