Un total de seis personas han sido capturadas por el caso de los cuatro ciudadanos estadounidenses que fueron secuestrados (dos de los cuales fueron encontrados sin vida) en Matamoros, Tamaulipas. Además, fueron decomisadas dos armas largas y una corta.
“Al momento se tienen seis personas detenidas por estos hechos, una de ellas, de nombre José “N”, encontrada en flagrancia, vinculada a proceso por secuestro agravado. Así como cinco más vinculadas a proceso por secuestro agravado y homicidio simple intencional: Antonio “N”, Luis “N”, Ever “N”, Juan Francisco “N” y Gustavo “N”, informó a través de un comunicado el Gobierno de México.
De igual manera, las autoridades indicaron que una de las armas aseguradas coincide con las pruebas balísticas. También han sido confiscados cinco vehículos relacionados a los hechos ocurridos en Tamaulipas.
Uno de los vehículos, una camioneta Chrysler Pacifica, es en la que viajaban las víctimas, también fue asegurada una ambulancia y otras tres camionetas. Otros de los materiales decomisados fueron ocho cargadores de distintos calibres, 93 cartuchos y dos chalecos tácticos.
El Gobierno de México resaltó que los sobrevivientes al ataque (una mujer que resultó ilesa y un hombre que fue herido) fueron entregados a Estados Unidos el pasado martes 9 de marzo y dos días después los cuerpos sin vida de las otras dos personas fueron entregadas conforme al protocolo.
También durante la noche del 8 de marzo fueron abandonados cinco individuos junto con un mensaje firmado por el grupo delictivo Cártel del Golfo en el que se indicaba que los hombres serían responsables del secuestro y muerte de los estadounidenses.
“El Cártel del Golfo, Grupo Escorpiones, reprueba energéticamente los hechos del día viernes 3 de marzo pasado, en donde desafortunadamente falleció una persona inocente madre trabajadora y fueron secuestrados 4 ciudadanos americanos, de los cuales 2 fallecieron, por ello hemos decidido entregar a los involucrados y responsables directos en los hechos, quienes en todo momento actuaron bajo su propia determinación e indisciplina”.
En el texto el grupo criminal también se “disculpó” con los habitantes de Matamoros, los deudos de la señora Arely (mujer mexicana que murió en el incidente) y las familias estadounidenses afectadas.
Al inicio, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Tamaulipas trató a los hombres como víctimas de delito, pero las primeras entrevistas revelaron que habrían participado en el secuestro.
El periodista Parker Asmann de la organización especialista en narcotráfico Insight Crime indicó que la supuesta disculpa del Cártel del Golfo sería una táctica para salvarse de una ataque frontal por parte del gobierno de EEUU y de las instituciones de seguridad de México.
“A fin de cuentas, más que un acto de buena fe, la ‘disculpa’ del Cartel del Golfo no debe verse más que como un acto calculado de autopreservación”, compartió Parker Asmann.
Las víctimas fueron halladas en una casa de seguridad en el ejido El Tecolote, según lo informó el gobernador Américo Villarreal, quien sostuvo una llamada con el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) durante la conferencia matutinal del 7 de marzo, fecha en que se confirmó el hallazgo de los cuatro estadounidenses, dos de ellos muertos y otros con vida.
Cabe recordar que tres de los cuatro estadounidenses secuestrados tienen antecedentes penales relacionados a drogas. Los hombres que murieron, Zindell Brown y Shaeed Woodard, estarían vinculados con la elaboración y comercio de drogas, portación de arma y robo con violencia.
Mientras que Latavia Tay McGee, mujer que no resultó herida en el ataque, tiene antecedentes por fabricación y tráfico de drogas, amenazas a un funcionario y robo de bienes. Por su parte, Eric Williams es el único de ellos que no tiene antecedentes delictivos.