La Embajada de Estados Unidos en México anunció que el Buró Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés) abrió una línea de información para recopilar fotos y videos del secuestro de 4 estadounidenses , y el asesinato de dos de ellos, que ocurrió en Matamoros, Tamaulipas.
Fue la tarde de este 10 de marzo que Oliver Rich, agente especial del FBI en la División de San Antonio, informó la creación de la Línea de Información de Medios Digitales (DMTL por sus siglas en inglés). Esto como parte de las indagatorias en relación al caso de Latavia McGee, Shaeed Woodard, Zindell Brown y Eric James Williams, quienes fueron privados de la libertad el 3 de marzo y hallados días después.
El FBI habilitó una página web para que las personas que tengan en su poder material audiovisual sobre el hecho las suban, para que éstas sean sometidas a análisis.
“Los miembros del público en general podrán subir sus fotografías y videos para que sean analizados por las autoridades policiacas”, indicó en un comunicado.
Para compartir las imágenes y videos los ciudadanos deberán llenar un breve formulario en el que la FBI solicita la siguiente información: nombre y apellidos, número de teléfono y dirección de correo electrónico. Proporcionar estos datos es obligatorio.
De manera opcional se puede compartir una descripción del material que pueda aportar a la investigación, como ubicación y hora.
Se puede subir un máximo de 4 archivos que en total no pueden exceder los 5000 megabytes (mb). En caso de que el material supere este límite es necesario llamar al 1-800-225-5324 para recibir instrucciones.
Asimismo, personas que tengan información que pudiera ser útil para esclarecer el caso la pueden compartir anónimamente con la División de San Antonio del FBI mediante una llamada telefónica al 210-225-6741 o en su página oficial.
La investigación del crimen por parte de EEUU está a cargo del FBI en conjunto con la Administración Federal Antidrogas (DEA), la Oficina de Investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional (HSI) y otros de sus socios federales. En tanto en México las indagatorias las lleva a cabo la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Tamaulipas.
En un inicio la FGJ apuntó que la hipótesis con más fuerza apunta a que no fue un ataque directo en contra de los estadounidenses, sino que se trató de una confusión.
Las autoridades mexicanas han realizados cateos en inmuebles y han asegurado vehículos que estaría implicados en el caso. En específico aseguraron una clínica y una ambulancia que estarían relacionados al caso.
Presuntamente el vehículo fue utilizado para trasladar a las víctimas luego de que fueron privadas de la libertad. Mientras que la unidad médica habría sido a la cual los llevaron para que recibieran primeros auxilios.
Cinco automóviles más fueron asegurados, entre ellos un Lamborghini que se presume fue robado en EEUU, del que hasta el momento no se ha dado a conocer qué relación podría tener con el secuestro y asesinato de los estadounidenses.
Por otra parte el 8 de marzo fueron encontrados hombres maniatados en calles del centro de Matamoros. Junto a ellos había un mensaje presuntamente dejado por Grupo Escorpión, brazo armado del Cártel del Golfo, en el que adjudicaron el crimen a cinco de sus integrantes.
En el mensaje los presuntos delincuentes ofrecieron una disculpa a la sociedad, pues aseguraron que los responsables actuaron por su cuenta y en contra de las reglas.
“Hemos decidido entregar a los involucrados y responsables directos en los hechos, quienes en todo momento actuaron bajo su propia determinación e indisciplina”, se pudo leer en la pancarta.
Las autoridades mexicanas no han descartado que el crimen haya sido cometido por el Cártel del Golfo.