Entre los fríos muros del Centro Federal de Readaptación Social No. 1 “El Altiplano”, Ovidio Guzmán López, mejor conocido como El Ratón, se encuentra en espera de que tanto autoridades mexicanas como estadounidenses determinen su situación jurídica luego de ser capturado el pasado 05 de enero en un intenso operativo que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) desplegó en Culiacán, Sinaloa.
Al ser identificado como hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán y como uno de los principales miembros de la facción del Cártel de Sinaloa conocida como Los Chapitos, agencias de seguridad seguían de cerca los pasos de El Ratón por su presunta responsabilidad en la conspiración para el tráfico de drogas tanto en México como en Estados Unidos.
No obstante, al ser detenido y procesado, la defensa legal de Ovidio Guzmán López ha buscado promover múltiples recursos jurídicos para amparar a su representado y, de este modo, impedir los actos reclamados tanto por la Fiscalía General de la República (FGR) como por el Gobierno de Estados Unidos que recientemente presentó formalmente una solicitud de extradición.
Las suspensiones provisionales y de plano otorgadas a “El Ratón”
Tan solo un día después de que Ovidio Guzmán López fuera detenido en la localidad de Jesús María a las afueras de Culiacán, un juez federal le otorgó una suspensión de plano en contra del proceso de extradición a Estados Unidos, aún y cuando el gobierno de Joe Biden todavía no presentaba la solicitud.
En dicha primera demanda de garantías presentada por los abogados de El Ratón se reclamó una posible “incomunicación, deportación, expulsión, extradición y su ejecución”.
En dicha ocasión, el juez federal -cuya identidad no fue revelada- decretó la suspensión de oficio contra la incomunicación de Ovidio Guzmán López, de modo que bajo las disposiciones legales e institucionales se le permitiera mantener contacto con sus familiares y defensores legales.
Asimismo y respecto a su extradición, a el hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán también le fue concedida una suspensión de oficio respecto a los actos consistentes para que no fuera presentado ante la justicia estadounidense.
La segunda demanda de amparo promovida por los abogados de El Ratón el 06 de enero fue interpuesta en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador y otras autoridades siendo el acto reclamado la posible tortura física o psicológica que pudiera ejercerse en contra de su representado.
La extradición del hijo del cofundador del Cártel del Pacífico fue nuevamente frenada a mediados del mes de enero cuando un juez federal le otorgó una nueva suspensión provisional.
En dicha ocasión, el juez Quinto de Distrito en Materia de Amparo y Juicios Federales en el Estado de México, Alfonso Alexander López, concedió dicho amparo para El Ratón que contemplaba que “el directo quejoso no sea extraditado y quede a disposición de este órgano jurisdiccional de amparo, en lo que corresponde a su libertad personal, en el lugar en que se encuentra recluido y a disposición del juez responsable”.
Cabe mencionar que los abogados de Ovidio Guzmán lograron el 24 de enero -fecha límite del anterior amparo- obtener una suspensión definitiva para efecto de que no fuera extraditado y continuara a disposición de autoridades mexicanas.
Tras dicha victoria temporal conseguida por la defensa legal de El Ratón, un juez de control del Centro de Justicia del Altiplano estableció el 05 de marzo como la fecha límite para que autoridades de Estados Unidos solicitara formalmente al Gobierno de México la extradición de Ovidio Guzmán López.
La disputa entre los abogados de El Ratón y autoridades volvió a tensarse durante las primeras semanas de febrero, cuando Ovidio Guzmán López sumó otra suspensión de oficio en contra de su extradición.
Los abogados del hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán promovieron otro amparo contra la orden de detención y ejecución, así como de la orden de detención con fines de extradición atribuida a un juez de control del Centro de Justicia Penal Federal en la Ciudad de México con sede en el Reclusorio Norte.
Fue el titular del Juzgado Tercero de Distrito en Materia de Amparo y Juicios Federales en el Estado de México, Everardo Maya Arias, quien concedió otra suspensión de plano y oficio para que El Ratón no fuera extraditado a Estados Unidos, sumando hasta ese momento tres amparos.
Días más tarde, Ovidio Guzmán López fue nuevamente blindado luego de que el mismo juez le concediera otra suspensión provisional en contra de su orden de aprehensión, ejecución y detención. Dicho recurso protegería a Ovidio Guzmán de cualquier orden de aprehensión que haya en su contra toda vez que no se trate de delitos que ameriten prisión preventiva oficiosa como medida cautelar.
El proceso legal que enfrenta el hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán dio un giro luego de que a finales de febrero autoridades mexicanas informaran que Estados Unidos solicitó formalmente la extradición de El Ratón.
Cabe recordar que el Gobierno de Joe Biden tenía como plazo hasta el 05 de marzo para realizar dicha solicitud. Ovidio Guzmán López es requerido por la justicia estadounidense por delitos relacionados al trasiego de drogas.
La Fiscalía General de la República (FGR) fue la institución que recibió la carta de formalización de extradición junto con el expediente y será la misma dependencia quien se encargue de entregar el expediente al juez federal del Estado de México para que se programe una audiencia.
Aunque dicha solicitud aún se encuentra en proceso, la tarde del pasado miércoles 08 de marzo trascendió que el mismo juez -Everardo Maya Arias- titular del Juzgado Tercero de Distrito en Materia de Amparo y Juicios Federales en el Estado de México concedió a El Ratón una suspensión definitiva en contra de la orden de aprehensión que solicitó un juez de control del Centro de Justicia Penal Federal en Sonora. No se dieron a conocer los delitos por los cuales fue señalado el hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Aunque será cuestión de tiempo saber si Ovidio Guzmán López permanecerá en prisión en México o será extraditado, los recursos legales que ha promovido su defensa hasta el momento lo han blindado ante la justicia mexicana y estadounidense, no obstante, si el Gobierno de Estados Unidos tiene un as bajo la manga, El Ratón podría seguir los pasos de su padre y ser extraditado.