El embajador estadunidense en México, Ken Salazar, lamentó las muerte de los dos ciudadanos encontrados en Matamoros, Tamaulipas tras ser secuestrados al cruzar la frontera. El canciller emitió un comunicado para posicionarse al respecto de la ola de inseguridad por parte de los cárteles del narcotráfico, situación que calificó de suma importancia a resolver.
“Lamentamos la muerte de dos ciudadanos estadounidenses en Tamaulipas. Este ataque contra nuestros ciudadanos demuestra la imperante necesidad de actuar contra los cárteles. Les comparto mi declaración al respecto.”, publicó el embajador desde su cuenta de Twitter.
De acuerdo con las autoridades estadunidenses, la reciente agresión por parte de grupos criminales hacia residentes de EEUU en territorio mexicano resalta la necesidad de reforzar los trabajos bilaterales para ofrecer la seguridad necesaria, no solo para los ciudadanos de Estados Unidos, sino también a la ciudadanía mexicana.
Ante el reciente caso, Ken Salazar hizo un llamado a las autoridades mexicanas para seguir las líneas de investigación tras el secuestro de Latavia McGee, Shaeed Woodard, Zindell Brown y Erick James Williams, para así hacer justicia y evitar más actos similares.
“Nuestra prioridad más alta es la seguridad de los ciudadanos estadunidenses. Reafirmamos nuestra disposición para trabajar estrechamente con el gobierno de México para que los responsables en este caso sean castigados y trabajemos para actos violentos similares no vuelvan a ocurrir”, destacó la Embajada en su comunicado.
Tras el reciente caso de secuestro, el gobierno de EEUU hizo un llamado a su ciudadanía a evitar cruzar o viajar a ciudades fronterizas, en espacial a Tamaulipas, entidad que es considerada como “un riesgo por los altos niveles de criminalidad y violencia”, particularmente ante la presencia y control que ejerce el Cártel de Golfo en la parte de la frontera.
“Estos hechos de violencia son un trágico recordatorio que nos exige reafirmar el compromiso de nuestros gobiernos para asegurar nuestra frontera compartida y fortalecer el combate a las organizaciones criminales transnacionales. Sabemos que es posible, y lo tenemos que lograr, ya que ello depende el bienestar de nuestros ciudadanos”.
Cabe destacar que las autoridades mexicanas informaron que se han abierto líneas de investigación para seguir con el caso, y destacaron que, entre las teorías más certeras se encuentra aquella en la que no existe relación entre las víctimas y los grupos criminales, por lo que el secuestro pudo haber sido una “confusión”.
Durante la rueda de prensa dada por el fiscal de Tamaulipas, Irving Barrios M. y Rosa Icela Rodríguez, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, se destacó que el secuestro no fue una agresión directa, pues hasta el momento los estadunidenses no se les relaciona con algún tema de crimen o similares.
Y es que los cuatro extranjeros habrían cruzado la frontera a Matamoros con fines médicos. Sin embargo, al viajar a Matamoros fueron secuestrados por grupos armados que conducían una camioneta blanca, quienes fueron supuestamente relacionados con el Cártel del Golfo.
En su conferencia diaria, el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), y el gobernador de Tamaulipas, informaron que a través de un operativo de seguridad se encontraron a los cuatro estadunidenses, de los cuales sólo dos sobrevivieron. Los cuerpos de los fallecidos fueron llevados con las autoridades de Estados Unidos.
Cabe mencionar, que el primer mandatario federal puntualizó que las autoridades del país vecino tienen derecho anteponerse en el caso, esto tras la ola de críticas y señalamientos de los estadunidenses.
“Es muy lamentable, ellos tienen derecho de manifestarse como lo hicieron porque nosotros no deseamos eso, estamos trabajando todos los días para garantizar la paz”, destacó Andrés Manuel en Palacio Nacional.