Durante la tarde del jueves 23 de febrero, habitantes de la alcaldía Xochimilco denunciaron haber sido reprimidos durante una recolección de firmas a las afueras del mercado Xochimilco por parte de “operadores políticos”.
Ya que de acuerdo con la Coordinación de Pueblos, Barrios Originarios y Colonias de Xochimilco, miembros de la administración de José Carlos Acosta se presentaron para retirar las mesas de recolección de firmas para la revocación de mandato del edil morenista.
Hay que recordar que, tras la manifestación reprimida por parte de un centenar de policías en San Gregorio Atlapulco en diciembre del 2022, que dejó un saldo de 24 heridos, los habitantes de la alcaldía anunciaron que buscarían revocar al morenista, quien logró reelegirse para el periodo del 2021-2024 a pesar de varias polémicas durante su administración.
A través de un comunicado informaron que la agresión ocurrió alrededor de las 14:40 horas cuando una mujer acudió a la mesa de los integrantes de la Coordinación de Pueblos, quien se identificó como parte de la Dirección de Jurídico y Gobierno acompañada de nueve personas.
Estas rodearon la mesa en donde se encontraban dos integrantes de la organización ciudadana y les exigieron que se retiraran del lugar bajo el argumento de que estaban ocupando la calle y el espacio público. “Luego de que empezamos a grabar, y que les manifestamos que no nos moveríamos, se retiraron”, se lee en el comunicado.
Pero pocos minutos después se presentaron más personas, quienes se identificaron como locatarios del mercado y dijeron que apoyaban al alcalde Carlos Acosta. Comenzaron a tratar de quitar la mesa de los integrantes de la coordinación alegando que no podían establecerse en el lugar.
“(...) Primero que porque ‘tenían un evento’, pero luego, alegando que ellas apoyaban al Alcalde. Tales acciones fueron respaldadas por el personal de jurídico y gobierno que regresó al lugar y que continuaron insistiendo en que no podíamos estar ahí”.
A pesar de que no reportaron agresiones físicas, aseguraron que las hojas con las firmas que habían recopilado a lo largo de la mañana del jueves fueron robadas por los presuntos simpatizantes de la alcaldía.
Derivado de los sucesos, la Coordinación de Pueblos, Barrios Originarios y Colonias de Xochimilco aseguró que no permitiría ninguna restricción al derecho de manifestación y libertad de expresión dentro de la demarcación.
Pues así como los trabajadores de la alcaldía y locatarios tienen derecho a respaldar a Carlos Acosta, “nosotros también tenemos el derecho de manifestar nuestro rechazo público a tal situación”.
“Las calles de la Alcaldía no le pertenecen al Alcalde, ni tampoco son dueños de lo que se puede y no se puede decir públicamente”.
De igual forma refrendaron su compromiso con continuar el proceso de recolección de firmas en más lugares de la alcaldía para la revocación de mandato contra el alcalde, pues de no hacerlo dejaría el precedente de que las calles “le pertenecen a José Carlos Acosta”.
Finalmente exigieron a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, de responsabilizarse por lo que hace “su cacique” dentro de Xochimilco.
Esta no es la primera polémica en la que se ve involucrado el alcalde ni es la primera acusación de represión, pues a finales de diciembre habitantes de San Gregorio Atlapulco lo habían acusado de tratar de adueñarse del panteón comunitario a través de la formación de un Comité en donde fue designada gente afín a este.
Además, se le acusó de haber amenazado a Patricia Guzmán, representante del Comité Pro-Panteón. Tras una mesa de negociaciones en la que participó el gobierno capitalino, el Comité Pro-Panteón, logró que sus exigencias se cumplieran por sobre los supuestos intereses del morenista.