Javier Martín Reyes, investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, (IIJ-UNAM), señaló que las pruebas presentadas por la defensa de la ministra Yasmín Esquivel en el caso de plagio no se han hecho públicas, sin embargo, las evidencias más sólidas sugieren que quien copió la tesis fue la actual ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
“Lo cierto es que todas las pruebas duras apuntan a que quien cometió el plagio fue Yasmín Esquivel. Fuentes y fechas no le ayuda, no cuadran”, señaló el investigador en entrevista con W Radio este 21 de febrero, quien agregó: “Mete más ruido que ella no dé a conocer cuáles son esas pruebas”.
Además, el investigador de Jurídicas recordó: “El secretario general de la UNAM ha comentado que en el peritaje se llega a la conclusión de que en la tesis de Baez hay un solo estilo y en la de Esquivel dos, eso sugeriría que ella fue la que tomó la tesis de Baez y la modificó”.
A mitad de febrero, la ministra Yasmín Esquivel obtuvo un amparo con el que impidió a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) hablar públicamente sobre el caso de plagio.
“Lo que más ha causado reacciones negativas es que ninguna de las autoridades de la UNAM puede decir nada del caso”, destacó el investigador universitario, quien cree la UNAM puede impugnar el amparo.
En otros espacios públicos la suspensión provisional que avaló una jueza, quien en el esquema del Poder Judicial es subalterna de la propia Yasmín Esquivel, generó la impresión de que la ministra intentó censurar al Comité de Ética convocado por la UNAM.
Javier Martín Reyes consideró que lo que busca Esquivel Mossa es impugnar las reglas del Comité Universitario de Ética, y aunque se puede seguir la investigación “no podemos conocer la resolución”.
“Se presentaron pruebas, que no se han hecho del conocimiento público… en una de esas son esas cartitas que subió la ministra a su cuenta de Twitter”, dijo el investigador universitario con relación a los documentos compartidos por la propia Yasmín Esquivel, aunque estos solo daban cuenta de su buen desempeño académico al titularse en la carrera de Derecho y no se pronunciaban sobre la autoría de la tesis en cuestión.
La UNAM anunció que no podría hablar del caso Esquivel
La máxima casa de estudios informó el viernes 17 de febrero que, por orden judicial, quedó impedida de informar sobre el caso de una ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación acusada de plagio.
La Universidad Nacional Autónoma de México dijo lamentar la orden judicial pues esta vulnera la libertad de expresión.
“La UNAM lamenta y no puede estar de acuerdo con el mandato judicial que busca silenciarla, coartando su libertad y el derecho a la información de los universitarios y de la sociedad”, manifestó la universidad en un comunicado.
La ministra Yasmín Esquivel se ha visto desprestigiada por evidencia de que la tesis de titulación que presentó en 1987 era una copia de otra presentada un año antes, es decir, la de Édgar Báez.
Aunque el consejo universitario determinó que la tesis de licenciatura en cuestión era un ejemplo de plagio, la propia universidad reconoció que no tiene normas que le permitan retirar el título o la cédula profesional.
El asunto fue trasladado a la Secretaría de Educación Pública (SEP), sin embargo, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador insistió en que la UNAM se pronunciara al respecto y acusó al rector Enrique Graue de “lavarse las manos, como Poncio Pilato”.
Por su parte, Esquivel Mossa aseguró que no va a dimitir como ministra de la Suprema Corte y ha insistido en que la tesis de 1986 fue una copia del trabajo que ella presentó en 1987.