El cuerpo de un joven de 25 años fue hallado al interior de un respiradero de drenaje ubicado en Canal Río Churubusco a la altura de Leyes de Reforma en la colonia Área Federal Central de Abasto en la Alcaldía Iztapalapa.
De acuerdo con los primeros reportes, el hombre que presuntamente se encontraba en estado inconveniente y situación vulnerable habría ingresado al respiradero de aguas negras en donde solía dormir y refugiarse. No obstante, fue hasta que otras personas que se encontraban en la misma situación ingresaron al respiradero que hallaron el cadáver.
Por su parte, la versión que ha manejado la Agencia Mexiquense de Noticias apunta a que el hombre de 25 años intentó ingresar al respiradero del drenaje por lo que cayó y murió.
Tras el hallazgo del cuerpo, al lugar de los hechos se trasladó personal del Heroico Cuerpo de Bomberos para realizar el rescate del cuerpo, además de los servicios periciales de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ CDMX) para comenzar con las investigaciones pertinentes.
El sitio fue acordonado por elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), además de que también se reportó el arribo de una ambulancia, sin embargo, al constatar que el joven ya no contaba con signos vitales, su cuerpo fue trasladado por el Servicio Médico Forense (Semefo) de la dependencia que encabeza Ernestina Godoy.
De forma extraoficial se reportó que el joven de 25 años pudo haber muerto intoxicado por los gases tóxicos que emana el drenaje o por una caída, no obstante, serán los dictámenes periciales los que determinarán la causa de muerte.
Dicho caso volvió a avivar la urgencia por exigir a las autoridades no solo que garanticen y apoyen a las personas en situaciones vulnerables, sino también que el Gobierno de la Ciudad de México realice las labores de mantenimiento necesarias para evitar accidentes, tal y como sucedió con el caso de las hermanas que fallecieron al caer a una coladera sin tapa en noviembre pasado.
Hermanas murieron tras caer en una coladera en Iztacalco
La noche del 10 de noviembre de 2022, dos hermanas perdieron la vida luego de caer en una coladera que se encontraba destapada a las afueras de la estación Metro Velódromo en la Alcaldía Iztacalco.
Las jovenes se dirigían al concierto de la agrupación de indie rock mexicana Zoé en el Palacio de los Deportes cuando cayeron en el pozo en el paso peatonal de Viaducto y Añil. El registro de aguas negras al que cayeron las jóvenes se ubicaba a escasos metros del puente que conecta con la estación Velódromo, la más cercana al recinto al que se trasladaban ambas víctimas de este fatal incidente.
“De haber sabido no les hubiera comprado sus boletos [...] Yo necesito verlas, saber qué les pasó, no me dejan pasar los policías en el retén, sólo quiero verlas. Por favor, son mis hijas”, pidió en dicha ocasión una mujer que se identificó como madre de las jóvenes, de acuerdo con los reportes del periodista Jorge Becerril.
Ambas hermanas murieron ahogadas, por lo que el caso generó gran indignación entre la ciudadanía que reclamó al gobierno capitalino el descuido en el que se encuentran algunas de las alcantarillas de la Ciudad de México.
Al respecto, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ CDMX) informó el pasado martes 14 de febrero que el padre de las hermanas que fallecieron firmó un acuerdo reparatorio.
El vocero de la dependencia que encabeza Ernestina Godoy detalló que a finales de 2022, al determinarse la existencia de un delito se reconoció a las hermanas como víctimas directas, motivo por el cual su núcleo familiar fue reconocido como víctimas indirectas.
Además del acuerdo reparatorio, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ CDMX) aseguró que desde que se supo del lamentable deceso de las jóvenes se brindó apoyo psicológico y de trabajo social a sus familiares.