El juicio que enfrenta el ex secretario de Seguridad, Genaro García Luna, en Brooklyn, EEUU ha dado como resultado que se revelen diversos episodios que involucran al crimen organizado a lo largo de México.
Una de las declaraciones más relevantes del martes 7 de febrero fue la de Édgar Veytia, ex fiscal de Nayarit, quien dijo que el ex presidente de México, Felipe Calderón, habría dado ordenes a García Luna para proteger a Joaquín El Chapo Guzmán.
Otro de los testigos fue José Moreno, un ex agente del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) en México que habló sobre un intento de captura en contra del Chapo Guzmán que según el testimonio, sucedió en febrero del año 2012.
Asimismo, los hechos habrían sucedido en Cabo San Lucas, Baja California. Los alguaciles de Estados Unidos lograron rastrear a El Chapo en un barrio de lujo en la entidad referida, por lo anterior contactaron con la entonces Policía Federal.
Según contó Moreno, después de que los alguaciles rastrearon el teléfono del capo recabaron información y solicitaron una reunión con los policías federales pactada para la 1:30 de la tarde. Al operativo acudieron 64 efectivos sin embargó no todos acudieron a la hora indicada.
El ex agente del FBI aseguró que a la operación de captura llegó una docena de uniformados a tiempo. Por su parte, el resto de los elementos de seguridad mexicanos llegaron una hora tarde, se trató de 52 uniformados, es decir la mayoría.
Derivado de estas acciones José Moreno contó que se sintió “desesperado, ansioso y un poco enojado”. Las declaraciones del agente fueron registradas en redes sociales por el periodista Keegan Hamilton, quien cubre el juicio desde EEUU.
El operativo resultó fallido púes no se pudo asegurar al capo. Días después de que no se logró la captura la Policía Federal desplegó un helicóptero tipo Blackhawk, así como cientos de efectivos para buscar a El Chapo. Sin embargo, no pudieron encontrar al narco.
Durante el testimonio de Moreno se mencionó el nombre de Iván Reyes Arzate, un individuo identificado como La Reina, quien durante la administración de Felipe Calderón fue un agente de la Policía Federal y lideró la Unidad de Investigaciones Sensibles.
La Reina, al parecer utilizó su posición para acceder a información clasificada para venderla al narco. Arzate se entregó a las autoridades estadounidenses. Se espera que Iván Reyes sea llamado a testificar en el juicio en contra de García Luna, sin embargo no se ha confirmado su participación.
Cabe destacar que ante las declaraciones de El Diablo sobre los presuntos vínculos del ex mandatario del PAN con el crimen organizado, el ex presidente Calderón se pronunció y calificó el testimonio como “absurdas declaraciones”, dijo que lo que Veytia confesó es una mentira. “Nunca negocié ni pacté con criminales”, comentó a través de su cuenta de Twitter.
“Por ahora niego categóricamente las absurdas declaraciones que reporta la prensa que hizo hoy el testigo Veytia. Lo que señala sobre mí es una absoluta mentira”, se pudo leer en el perfil de Calderón.
Tan solo un día antes, lunes 6 de febrero, el ex tesorero de Coahuila, Héctor Villarreal se presentó como testigo en el juicio y compartió detalles sobre supuestos sobornos a un medio de comunicación mexicano de circulación nacional.
Los pagos tendrían el objetivo de hablar de manera positiva de Genaro García Luna, además de las declaraciones se presentó una factura con el concepto “Publicidad campaña de rescate al turismo 2009″.
Según las declaraciones de Villarreal, dicha campaña nunca fue realizada, más bien buscaba justificar la salida de recursos. También detalló que Humberto Moreira sería cercano al medio El Universal, por lo que el habría sido el enlace que ayudó a García Luna.
Por su parte Humberto Moreira respondió al testimonio y dijo que la declaración de Villarreal es “un relato disparatado”.