El miércoles de ceniza está a unos días de comenzar y con él arrancará también la Cuaresma, un período especial para los feligreses, quienes por devoción o creencias realizan un ayuno y prefieren la ingesta de mariscos u otros alimentos, antes que la carne roja.
¿Cuál es su significado? Cuaresma proviene del latín “quadragésima” que significa 40 días antes de la Pascua, también llamada Pascua de Resurrección o Domingo de Resurrección, fiesta especialmente importante en el cristianismo que conmemora la resurrección de Jesucristo.
La Cuaresma comienza cada año durante el miércoles de ceniza, que este 2023 iniciará el próximo 22 de febrero y concluirá el Domingo de Ramos, cuando da inicio la Semana Santa (2 de abril).
De acuerdo con información histórica, este período representa seis semanas de purificación, así como los 40 días que Jesús permaneció en el desierto de Judea, ubicado en Jerusalén. También simboliza el tiempo que duró el diluvio universal, que de acuerdo con antiguos libros religiosos fue una grave inundación mundial que se registró hace millones de años.
Para algunas religiones como la católica, se trata de una época en la que se evita por ejemplo comer carne roja, pues representa el cuerpo de Cristo crucificado. Por ello, se acostumbra la preparación de platillos a base de pescados, mariscos, así como algunas aves (pollo o pavo) por mencionar algunos.
Mientras que la Semana Santa también es un período importante para muchos feligreses, ya que realizan festividades o representaciones especiales de la pasión y muerte de Jesucristo en diversas partes del país y pueblos.
Este período arranca con el llamado domingo de Ramos, jueves y viernes Santos, luego Sábado de Gloria y concluye con el domingo de Resurrección.
De acuerdo con el catolicismo, el domingo de Ramos evoca la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén, donde fue recibido con cantos y palmas, por ello, durante ese día se usan ramos para celebrar esta fecha.
Mientras que, el Jueves Santo representa la última cena de Jesús con sus apóstoles, el Viernes Santo se destina para llevar a cabo actividades como el Vía Crucis, que marca el momento en que Jesús es condenado a muerte, crucificado y sepultado en el sepulcro.
En tanto, el sábado de Gloria tiene que ver con la muerte y resurrección de cristo y durante esa fecha, se procura solemnidad y respeto. Y finalmente el domingo de Pascua, que evoca la resurrección.
Cientos de personas se unen en las calles o avenidas de sus lugares de residencia para celebrar misas, realizar procesiones o representaciones actuadas de la pasión de cristo. De ese modo, la conmemoración de los últimos pasajes de la vida de Jesús de Nazaret, se han ido instituyendo por la iglesia católica al pasar de los años; sin embargo, la iglesia no pudo ni ha podido evitar que cada pueblo, región o país, le ponga su propio sello.
Según investigaciones históricas, durante la época virreinal se encontraron descripciones de estas fiestas que datan de 1582 donde se señala la gravedad y solemnidad con que se llevaban a cabo las peregrinaciones, y cómo éstas eran acompañadas de tres individuos enlutados que tocaban de vez en cuando tres grandes trompetas destempladas.
A través de los años se ha modificado o adoptado la manera distinta de celebrar este período, pues existe una combinación de elementos en donde no solo se recuerda la Pasión de Cristo. Y es que en algunos casos, se llega a la transgresión de las normas como sucede con los rarámuris en la Sierra Tarahumara, donde los fariseos rompen los tabúes sexuales de su propia cultura en complicidad con el Judas que se caracteriza por su “actividad sexual”; muy similar sucede entre los coras en Nayarit, donde también son los fariseos quienes transgreden la norma a través de juegos sexuales, peleas, etcétera. Pero todos estos elementos tienen una secuencia y una relación lógica de acuerdo a su cultura.