Los Mexicles, un grupo criminal surgido al sur de Estados Unidos como facción armada del Cártel de Sinaloa, han sido señalados como los responsables de múltiples olas de violencia en Ciudad Juárez y otras regiones del estado de Chihuahua.
El nombre de esta banda volvió a posicionarse en el ojo público desde las primeras horas del 2023, pues el 1 de enero sus integrantes coordinaron y realizaron un ataque armado al Centro Estatal de Reinserción Social (Cereso) No. 3 de la ciudad fronteriza para lograr la liberación de sus compañeros que estaban en reclusión.
Tras una serie de agresiones y enfrentamientos, 30 sujetos se escaparon del penal. Entre los evadidos estaba Ernesto Alfredo Piñón de la Cruz, “El Neto”, líder de Los Mexicles, quien fue descrito por el exgobernador de Chihuahua, Javier Corral, como “el narco más duro y desalmado” de la organización.
Su liberación fue considerada como un episodio victorioso para el grupo criminal, pero los infortunios para la estructura delincuencial llegaron con el paso de las semanas.
La fuga masiva del 1 de enero, si bien se tradujo en la libertad del “Neto”, le costó la vida a una figura de alto mando de la pandilla que surgió como brazo armado del Cártel de Sinaloa y que, aparentemente, trabajan para el grupo de Ismael “El Mayo” Zambada.
Un día después de los violentos acontecimientos, la Fiscalía General del Estado (FGE) de Chihuahua compartió una lista de los presos que perdieron la vida durante el ataque al Cereso No. 3. En este recuento estuvo incluido César Vega Muñoz, conocido como “El Chilín”, identificado como el principal subalterno del “Neto” y segundo al mando de Los Mexicles.
En un principio se difundió el rumor de que “El Chilín” habría logrado escapar, pero murió junto con otros seis reos y 10 custodios.
Días más tarde llegaría el siguiente golpe para Los Mexicles. A menos de una semana de haber recuperado su libertad, “El Neto” murió durante un intenso enfrentamiento con las fuerzas estatales y federales.
Tras varias jornadas de búsqueda, Piñón de la Cruz fue identificado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Agencia Estatal de Investigación, la Fiscalía de Distrito zona Norte y la Secretaría de Seguridad Pública (SSP). Estaba escondido en un domicilio de la colonia Aztecas.
La madrugada del 5 de enero, los agentes de seguridad arrobaron al lugar donde se resguardaba y fueron recibidos a tiros. Luego de algunos minutos, “El Neto” intento huir a bordo de un vehículo y se impactó contra una gasolinera.
A pesar del accidente, mantuvo el intercambio de balas con los uniformados, pero fue herido de gravedad y falleció cuando era trasladado a la Fiscalía de Distrito Zona Norte.
Con “El Neto” y “El Chilín” fuera del mapa, existía la duda de quién asumiría la cabeza de la banda criminal. El 27 de enero, la Fiscalía de Chihuahua fue la encargada de brindar una respuesta.
Durante los operativos para capturar al resto de reos que se fugaron del penal de Ciudad Juárez, las autoridades capturaron a Urbano Jiménez Guerra, alias “El Cubano”, un presunto criminal que no estaba recluido en el Cereso 3, pero jugaba un papel importante.
Según los reportes, “El Cubano” es quien se iba a posicionar como jefe de Los Mexicles tras la muerte del “Neto” y “El Chilín”. “Derivado de las labores de investigación, se obtuvo información documentada de que dicho sujeto, se quedaría al mando de parte de la estructura criminal”, detalló la FGE.
Fue aprehendido en el fraccionamiento Praderas del Sol en posesión de cinco armas largas, tres armas cortas, cartuchos de múltiples calibres, droga y un vehículo. Concretamente, “El Cubano” fue capturado por los ilícitos de violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos y delitos contra la salud.
De esta manera, en menos de un mes, Los Mexicles perdieron a los tres hombres que figuraban como los criminales de mayor rango al interior del grupo. Hasta el momento se desconoce quién será la persona que tome el liderazgo tras esta captura y los fallecimientos previos.