El ex secretario de Seguridad Pública durante el gobierno de Felipe Calderón, Genaro García Luna, actualmente es juzgado en la Corte de Brooklyn, en Nueva York, Estados Unidos, donde se esperan que 70 personas testifiquen en su contra; entre ellos, diversos narcotraficantes.
El primer en hablar de esa larga lista de testigos fue Sergio Villarreal Barragán, El Grande, un ex policía que se volvió lugarteniente de los Beltrán Leyva, y quien señaló a García Luna de recibir sobornos millonarios por parte del Cártel de Sinaloa.
Sin embargo, de acuerdo con la defensa del llamado “súper policía”, una gran cantidad de los testigos no tienen las pruebas suficientes y, por el contrario, declaran para conseguir beneficios personales. Así lo dio a conocer el corresponsal de Vice News, Keegan Hamilton, frente a las declaraciones de César de Castro, abogado de García Luna.
Y es que, de acuerdo con Hamilton, algunos de los testigos que la fiscalía estadounidense presentará todavía enfrentan condenas tras las rejas, por lo que habrá quien declarará con el fin de ver reducida su sentencia.
Por su parte, otro de los beneficios que podrían obtener algunos más sería la residencia estadounidense al término de sus condenas, pues los narcotraficantes no son considerados como inmigrantes, por lo que podrían conseguir papeles.
Es en ese sentido que la defensoría de García Luna cuestionó las declaraciones del primer testigo ante la falta de pruebas. “Sin dinero. Sin fotos. Sin videos. Sin correos electrónicos. No hay registros. Sin documentos no hay evidencia creíble y plausible de que el señor García Luna ayudara a los cárteles”, cuestionó César de Castro.
No obstante, lo que el gobierno de Estados Unidos sí tiene son testigos cooperantes, aseveró Keegan; lista entre quienes se encuentran criminales como Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, o uno de los hermanos de Ismael El Mayo Zambada.
Frente a ello, César de Castro acusó que algunos de los testigos en contra de su cliente lo único que buscan es venganza. El jurista sugirió que diversos narcotraficantes han hecho tratos con el gobierno para poder salir antes de prisión. “(Los cárteles) quieren reírse al último (...) y quieren su ayuda para hacerlo”, condenó durante el juicio.
Fue en ese sentido que el defensor de García Luna llamó a los próximos testimonios como “rumores, especulaciones y las palabras de algunos de los criminales más grandes del mundo, muchos arrestados y extraditados por el señor García Luna”.
Por su parte —del lado acusatorio— el fiscal Philip Palmer llamó al acusado “un hombre que traicionó a su país”. “Mientras se le encomendó trabajar para el pueblo mexicano, tenía otro trabajo, un trabajo más sucio, uno más lucrativo”, expuso el acusador.
“Tomó millones y millones de dólares en sobornos en efectivo para permitir que el cártel de drogas más grande de México enviara toneladas, literalmente, de cocaína a los Estados Unidos”, expresó Palmer.
“La persona encargada de perseguir al cártel era un realidad su activo más preciado”
En tanto, la Fiscalía General de la República (FGR) en México confirmó que al momento hay dos órdenes de aprehensión en contra del ex funcionario por crímenes cometidos en México, mientras que una tercera orden está en trámite.
En la primera de ellas se le acusa de ingresar armas de forma ilegal de Estados Unidos a México a través de la operación conocida como Rápidos y Furiosos, mientras que la segunda es en relación al caso CEFERESOS.
Se espera que el juicio en su contra tenga una duración total de ocho semanas, por lo que la resolución del jurado podría llegar en marzo próximo, donde se determine si el “súper policía” recibió los supuestos sobornos millonarios o no.