Durante la tarde del viernes, se celebró la audiencia inicial en contra de Carlos Alfredo “N”, conductor del convoy durante el choque en la Línea 3 del Metro ocurrido el pasado 7 de enero y que dejó una persona muerta y más de 100 heridos.
Fue durante la tarde del viernes que el conductor fue detenido por agantes de la Policía de Investigación (PDI) en su domicilio ubicado en la alcaldía de Iztapalapa. Pues las autoridades señalaron que uno de los factores que desembocaron el choque fue su presunta conducción negligente.
Y durante la noche, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) dio a conocer que realizaron la formulación de imputación contra este por su presunta responsabilidad en los delitos de homicidio y lesiones, ambos culposos.
Se trató de la audiencia inicial pues se le acusa de ser el responsable del accidente entre las estaciones Potrero y la Raza. La audiencia duró más de siete horas en las salas de oralidad en la colonia Doctores y el Ministerio Público (MP) formuló la imputación al detenido los delitos mencionados.
Sin embargo, la defensa del conductor solicitó la duplicidad del término constitucional, por lo que la audiencia se aplazó y seguirá el primero de enero donde se determinará su situación jurídica así como las medidas cautelares en lo que se desarrollan las investigaciones.
A pesar de esto, el juez de la causa impuso prisión domiciliaria hasta que se celebre la próxima audiencia. Hay que recordar que el conductor quedó prensado entre los vagones del metro, lo que le dejó una pierna lesionada.
Por otro lado, durante la tarde del viernes, la FGJCDMX informó otro de los motivos por los que se dio el incidente: la quema y el corte intencional de cables dentro de las estaciones, lo que habría interferido en el correcto funcionamiento del convoy.
“Sabotaje” en la Línea 3
Fue durante conferencia de prensa que el vocero de la Fiscalía capitalina, Ulises Lara, indicó que los cables afectados fueron los de dos registros de conexión que contienen cableado de comunicaciones, señalización y pilotaje automático en la estación Potrero, en sus costados oriente y poniente.
De igual modo aseguró que ya se tenía desde un día antes del accidente un reporte de fallas en la señalización al interior del túnel, por lo que se estableció la “marcha de seguridad” en la que señalan que operadores deberán tener un avance a una velocidad máxima de 15 kilómetros por hora en curva y 35 km/h en línea recta, además de que mantendrán el pilotaje automático.
Es aquí donde entra el papel del conductor, pues investigaciones de la Fiscalía, junto con el registro electrónico del convoy 24, indican que el tren rebasó el límite de velocidad y no siguió con las indicaciones.
“El sistema lo detuvo de inmediato, pero después registra un cambio a Pilotaje Automático alcanzando una velocidad de 45 kilómetros por hora hasta el momento del impacto (...) No existe evidencia de que el conductor realizara frenado de emergencia o alguna otra maniobra para detener el tren”
Además resaltó que el conductor ya había realizado una vuelta de Indios Verdes a Universidad, por lo que ya conocía las indicaciones en el tramo Potrero la Raza. Tras lo expuesto, informó que la Fiscalía abrió una carpeta de investigación por el delito de daño doloso a vías de comunicación en contra de quien resulte imputable.
Este puede derivar en el delito de sabotaje, de acuerdo con el Código Penal de la ciudad. Además, la información presentada por las autoridades respalda la versión del gobierno de la capital en el que las fallas en el transporte son deliberadas para dañar al gobierno de Claudia Sheinbaum.