Desaparición del médico Carlos Ignacio apunta a relación con una paciente, según Fiscalía de Sonora

Carlos Ignacio Ríos Basulto es un médico de 29 años de edad perteneciente al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el estado de Sonora y desde el 17 de enero, cuando este se dirigía a su domicilio en la colonia San Juan Capistrano, se encuentra desaparecido.

De acuerdo con los primeros reportes, el urgenciólogo fue visto por última vez al salir de su turno en una clínica privada de la colonia Centro alrededor de las 20:40 horas. Pero al día siguiente de la desaparición, elementos de Seguridad Pública Municipal de Cajeme localizó el auto del médico a 10 kilómetros de su casa.

La Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJE), indicó que el automóvil, hallado en un terreno entre las calles Antilla y Altamira dentro de la colonia Las Misiones, no presentaba ningún indicio de violencia, únicamente una bata blanca y un par de maletines.

Ante la poca información y avances, finalmente, la Fiscalía brindó información sobre el caso dando a conocer la principal línea de investigación en el caso: una presunta relación con una mujer. Dicha información fue dada a conocer por la titular de la Fiscalía, Claudia Indira Contreras Córdova, dio un mensaje por redes sociales en donde presentó algunos de los avances en el caso.

Indicó que se tiene como prinicipal línea de investigación una relacionada con una paciente de 22 años en el municipio de Cajeme con la que habría establecido una relación íntima tras un tratamiento médico en el pasado. De hecho, la fiscal general aseguró que Carlos iba a encontrarse con dicha persona el día de su desaparición.

“Con el tiempo se volvió más cercana. Previo a su desaparición, la víctima se trasladaría a encontrarse con dicha persona. Logramos reunir datos de prueba que confirman que el doctor iba a reunirse con ella: tenemos la fecha, lugar y hora exacta en la que coincidirían”, expusó Indira Cortés en el video de la Fiscalía.

Fue a partir de ese momento que el sujeto perdió contacto con su familia y que al día siguiente se encontró con el vehículo. Por último adelantó que se tenían otros datos obtenidos por medio de videocámaras, cateos, revisión al vehículo y entrevistas con familiares y amigos del doctor, aunque no profundizó en ninguna de ellas.

La fiscal también aseguró que la familia de la víctima fue objeto de al menos tres extorsionadores que pretendían aprovecharse del asunto para sacar beneficio a su costa. Finalmente, indicó que la Fiscalía ya está en condiciones de solicitar una orden de aprehensión, probablemente contra la paciente mencionada cuya identidad no fue precisada.

Por otro lado, los familiares, compañeros y amigos del médico realizaron un plantón el pasado 25 de enero en el discóbolo de la Laguna del Náinari como una forma de exigir la localización de Carlos Ignacio a las autoridades estatales.

En el lugar se mantuvieron más de 100 personas quienes con pancartas recordaron con cariño y respeto al doctor desaparecido. Ahí, Jaqueline Ríos, hermana del Carlos Ignacio, pidió ayuda a la sociedad para dar con su paradero y que las autoridades dieran con él pronto.

En ese mismo mensaje, Jaqueline Ríos denunció que su familia había sido víctima de extorsiones por parte de personas sin escrúpulos que les daban información falsa y lamentó los hechos.