El juicio en contra de Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública durante el periodo presidencial de Felipe Calderón, ha generado diversas reacciones desde el comienzo del proceso para elegir al jurado que decidirá el destino de García Luna.
Benjamín Robles Montoya, vicecoordinador del Partido del Trabajo (PT) aseguró que el caso del ex secretario revela el nivel delincuencial que se mantuvo en materia de seguridad durante las administraciones a cargo del Partido Acción Nacional (PAN).
“Es inaudito que Felipe Calderón respaldó y mantuvo firme en el cargo a García Luna, hasta el final de su sexenio, pese a los múltiples señalamientos de colusión con la delincuencia organizada, así como sus reiteradas violaciones a la Constitución, a las leyes y a los derechos humanos, como los evidenciados montajes televisivos de detenciones, confesiones ante cámaras de presuntos delincuentes sin abogados presentes, entre otras tropelías”, se puede leer en un boletín del partido político.
Las diputadas y diputados del Partido del Trabajo (PT) compartieron un boletín de prensa en el que se pudo ver que las acciones de García Luna hacen “voltear a ver” al ex presidente Calderón, pues si tenía conocimiento habría sido cómplice y en caso de que no supiera entonces sería “incompetente”, señaló
“Es inevitable voltear a ver a Calderón en este asunto. Si lo sabía, fue cómplice y debe ser encarcelado. Si no lo sabía, entonces se demostraría que era un incompetente para ejercer la Presidencia de la República”, sentenció en un documento con fecha del 20 de enero.
Estos comentarios son parecidos a lo expresado por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien el pasado 18 de enero detalló que vislumbra tres escenarios para Felipe Calderón tras el proceso que enfrenta García Luna en Brooklyn, EEUU.
“Tenemos diferencias pero no es mi fuerte la venganza. Yo diría que el caso de Felipe Calderón es un caso lamentable”, comentó AMLO.
Para López Obrador el primer escenario consiste en que García Luna se declare inocente, con lo que Calderón quedaría totalmente redimido, se trata de la opción más simple. En un segundo escenario AMLO habló de la posibilidad de que “su hombre de confianza” lo haya engañado, lo cual también sería una exoneración para Calderón, pues no estaría involucrado.
La última opción es que García Luna se declare culpable y que Felipe Calderón sea cómplice o encubridor de las presuntas relaciones de García Luna con el Cártel de Sinaloa. “Vamos a esperar que estas cosas se aclaren. Yo no le deseo mal a nadie”, compartió el mandatario.
Durante tres días, más de una centena de ciudadanos desfilaron ante la jueza Peggy Kuo. Dichos ciudadanos estadounidenses habían sido anteriormente preseleccionados de 400 personas escogidas al azar, quienes tuvieron que responder un cuestionario de más de 71 preguntas, entre las cuales estaban algunas como ¿Cuál es su principal fuente de información?, ¿ve algún programa o lee algún libro sobre delincuencia o sistema de justicia penal?, entre otras.
Apenas el pasado jueves 19 de enero el juez Brian M. Cogan resolvió que la riqueza de García Luna es irrelevante para el jurado.
El documento de la Corte del Distrito Este de Nueva York consideró que la riqueza de García Luna después del 2012 es “irrelevante” e incluso podría resultar “injustamente perjudicial”, pues no hay elementos que comprueben que su “costoso estilo de vida” fuera financiado por el Cártel de Sinaloa.
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