Qué había en la “narcocasa” que el Cártel de Sinaloa abandonó en Nuevo León

El operativo encabezado por fuerzas estatales y federales no consiguió la detención de ningún presunto criminal

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Agentes estatales y federales identificaron
Agentes estatales y federales identificaron un inmueble que era usado como casa de seguridad a unas cuadras de la Presidencia Municipal de Los Ramones. (Especial)

A sólo cinco cuadras de la Presidencia Municipal de Los Ramones, en el estado de Nuevo León, la Fuerza Civil y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) encontraron una casa de seguridad que aparentemente era utilizada por miembros de una célula criminal ligada al Cártel de Sinaloa (CDS).

El inmueble, ubicado en la calle 13 de septiembre, fue encontrado por las autoridades luego de un enfrentamiento entre policías estatales y al menos dos sujetos armados que circulaban en la zona a bordo de una camioneta Toyota Tacoma blindada artesanalmente.

Después de un extenso cateo, que se prolongó desde la noche del lunes 16 de enero hasta la madrugada del martes 17, las dependencias mencionadas, con apoyo de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), encontraron diversos indicios para sospechar que la construcción era utilizada como centro de operaciones del grupo criminal.

Entre los principales hallazgos estaba una gorra en color verde con las siglas “JGL”, que aluden al nombre de Joaquín El Chapo Guzmán Loera.

Las autoridades hallaron múltiples indicios
Las autoridades hallaron múltiples indicios que apuntaron la adscripción de la banda criminal al Cártel de Sinaloa. (Especial)

Otro elemento que reveló la aparente pertenencia de dicha célula delictiva al cártel sinaloense fue una tabla “de tortura”, en color negro, con la inscripción “701″. Conviene recordar que este número ha sido ampliamente utilizado por miembros de la organización criminal del Chapo debido a que, en 2009, la revista Forbes lo ubicó en el lugar 701 de la lista de los hombres más ricos del mundo. Para ser incluido en dicho recuento, la publicación considera a personajes con una riqueza mayor a los mil millones de dólares.

Estas tablas son comúnmente utilizadas por grupos delincuenciales para golpear a sus víctimas durante interrogatorios y sesiones de tortura. Por lo general aplican esta medida en contra de personas que presuntamente incurrieron en algún delito (como el robo) en sus zonas de operación.

“El Chapo 701″ es el nombre que Alejandrina Guzmán Salazar, hija del capo y hermana de Iván Archivaldo, le dio a su propia marca de ropa y accesorios en 2019. Supuestamente, la misión de su negocio era ayudar a personas con adicciones y recluidas en el penal de Puente Grande.
Las autoridades encontraron varias armas
Las autoridades encontraron varias armas de fuego y cartuchos. (Twitter/@revistacodigo21)

Sumado a lo anterior, las fuerzas de seguridad aseguraron tres armas de fuego, 37 cargadores, cartuchos y chalecos tácticos. De igual manera quedó bajo su disposición la Toyota Tacoma que visualizaron horas antes, un auto Ford Grand Marquis y una motocicleta.

Hasta el momento no se han reportado personas detenidas durante el operativo, por lo que se presume que, tras el enfrentamiento, la célula que operaba en el inmueble había abandonado la zona.

Otro aspecto particularmente llamativo del operativo fueron los envoltorios con aparente marihuana que encontraron las autoridades, pues tenían inscripciones que simulaban el estilo pictórico prehispánico. Uno de estos dibujos se asemejaba a las cabezas colosales características de la cultura olmeca, salvo que, en este caso, tenía la lengua por fuera.

Al rastrear el domicilio mediante un sistema de localización satelital, como Google Maps, es posible identificar que se ubica a menos de un kilómetro del Palacio Municipal, lo equivalente a tres minutos de trayecto en automóvil.

Las imágenes más recientes captadas por esta plataforma datan de julio de 2019. En ellas se aprecia que dentro del terreno, además de un par de vehículos (distintos a los modelos asegurados) y una motocicleta, había al menos dos caballos. Por el momento se desconoce si desde ese entonces la casa ya pertenecía a los miembros del cártel.

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