La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, junto a la diputada nacional de ese espacio, Marcela Campagnoli, denunció por abuso de autoridad al ministro de Salud Mario Iván Lugones, a raíz del cambio del consejo directivo del Hospital Garrahan. Carrió enmarcó la denuncia en el pago de un bono de 500 mil pesos que generó malestar en el Gobierno. Según se indicó, la denuncia será sorteada mañana en los tribunales federales de Comodoro Py 2002.
Para la dirigente, “la directiva impartida tiene por único fin amedrentar a toda autoridad administrativa a que se someta al criterio del Ministerio de Salud de la Nación, aún cuando, se actué en contra de las normas legalmente vigentes”.
Previamente, en su cuenta de la red social X, Carrió había dicho: “lo que sucede con el hospital Garrahan es una vergüenza que llevará en su conciencia el presidente (Javier) Milei por toda su vida.”
La polémica surgió cuando el anterior Consejo de Administración del Hospital Garrahan decidió, de manera unilateral, otorgar un bono de $500.000 al personal del hospital. Tras ello, el Ministerio de Salud salió al cruce de tal decisión, al señalar que no fue consultada ni evaluada con el Gobierno. El otorgamiento del bono generó malestar entre las autoridades nacionales, que pusieron de relieve las remuneraciones que perciben de los miembros del Consejo. Eso generó incomodidad en el personal.
Según señala la presentación judicial de Carrió y Campagnoli, “Lugones en su calidad de Ministro de Salud de la Nación habría solicitado la renuncia de la totalidad del consejo directivo del Hospital “Profesor Dr. Juan Garrahan” lo que obedecería a la entrega de un “bono” al personal. Dicha orden habría sido emitida directamente por Lugones -en anuencia con sus superiores- con motivo de que dicho bono (que es una facultad discrecional del consejo directivo) no habría sido consultado con él en su calidad de máxima autoridad de la cartera”.
La presentación afirma que esa suma “obedecería a una suma que habitualmente se le entrega a los profesionales de la salud que prestan funciones en el mencionado nosocomio, la que obedecería al excesivo trabajo y los bajos sueldos que estos cobran por sus funciones”.
Carrio y Campagnoli continuaron defendiendo el pago del bono: “Dicha suma proviene de un fondo que el consejo administra y del cual puede decidir discrecionalmente y sin necesidad de consultar con el Ministerio de Salud, tal como históricamente se ha efectuado”.
Además, la denuncia indica que al día siguiente de jurar en el cargo de ministro de Salud, Mario Lugones les pidió la renuncia a todos los integrantes del Consejo de Administración del Hospital Garrahan y que la razón fue haber avalado el pago del bono de 500.000 pesos al personal, según reportaron los medios. “El único motivo por el cual fue tomada esta decisión claramente arbitraria y contraria a la normativa que le permite discrecionalmente asignar esos fondos inconsultamente al consejo, es un encono personal del Ministro y las autoridades del Ejecutivo posiblemente motivado en evitar un efecto contagio en los reclamos salariales por parte de los restantes nosocomios ya que se ha recortado el presupuesto de Salud”.
Hoy, la Junta Interna de la Asociación de Trabajadores del Estado del Hospital Garrahan anunció un paro de 48 horas para los días 8 y 9 de octubre. La medida se enmarca en un reclamo por una recomposición salarial urgente, algo que los gremios consideran imperioso ante la pérdida del poder adquisitivo. Norma Lezama, referente sindical del hospital, sostuvo que “el bono se cobró, lo cual es una conquista. Es por única vez y de manera extraordinaria, pero da un alivio por este mes al equipo de salud”. Además, destacó que el pago se realizó con “recursos propios del hospital”.