La biodiversidad comprende a toda la variedad de seres vivos en la Tierra, incluyendo la diversidad de ecosistemas, especies y genes. Es así que su importancia y cuidado no debe subestimarse ya que sin ella actividades esenciales como la agricultura serían inviables.
Prácticas como la labranza de conservación y la siembra de cultivos de cobertura, ayudan a lograr un equilibrio entre la producción y la preservación ambiental. Además, no se debe dejar de lado el papel que juega el cambio climático como un factor agravante en la pérdida del equilibrio del medioambiente.
“El sector agrícola genera un impacto en la biodiversidad, desde Bayer estamos trabajando en desarrollar algunas prácticas para generar un vínculo entre la agricultura y la biodiversidad que sea simbiótico”, explicó Galo Benedit responsable de Interfaz comercial de Sistemas Agronómicos de Bayer Crop Science.
En este contexto, en el cual los eventos extremos -como sequías y fenómenos climáticos- son parte de una realidad palpable, Bayer está desarrollando distintos proyectos que permitan elaborar y definir prácticas, metodologías de trabajo y recomendaciones para que conjuntamente con los productores asociados se pueda defender la biodiversidad.
“Las iniciativas que estamos llevando adelante están enfocadas en restituir la salud del suelo con distintas prácticas que recompongan la estructura, la salud y la biodiversidad que promueven el desarrollo de microorganismos en el suelo, la promoción de polinizadores, la promoción de corredores florales o corredores verdes donde se busca la promoción de organismos”, describió Benedit.
Además, el responsable Sistemas Agronómicos, explicó que combatir las plagas y enfermedades que se desarrollan en los cultivos resulta de vital importancia no solo para el ambiente y la biodiversidad sino también para la producción de alimentos.
Como parte de su estrategia, en pos de seguir trabajando en iniciativas para la conservación saludable del suelo y el desarrollo de prácticas sustentables, Bayer, está en sintonía con los acuerdos alcanzados en el Convenio sobre la Diversidad Biológica de las Naciones Unidas. “Es imperativo para nuestra supervivencia, un seguro de vida para todos. Necesitamos proteger y mantener la biodiversidad”, afirmó Benedit.
De esta manera, la agricultura regenerativa puede ser un aliado en la protección del medio ambiente, usando tecnologías y prácticas que minimicen su impacto. “Invertimos en herramientas y servicios que balanceen los objetivos de producción y conservación”, agregó Benedit.
La biodiversidad no solo es esencial para los equilibrios naturales, sino que es una condición clave para la seguridad alimentaria y la supervivencia humana, por lo que la industria agrícola, consciente de su rol, avanza hacia prácticas más sustentables.
No se debe dejar de lado la importancia de la integración de tecnologías digitales en las prácticas agrícolas como un avance clave hacia una producción más eficiente y sostenible. La adopción de herramientas de precisión, como el monitoreo satelital de cultivos o la aplicación de sistemas de riego inteligentes, permite optimizar el uso de recursos naturales, minimizando así las intervenciones que puedan alterar negativamente la biodiversidad del entorno.
El compromiso global y los esfuerzos evidencian un cambio de paradigma en el sector agrícola, hacia un mejor manejo y protección de la diversidad biológica del planeta, un legado vital para preservar a las futuras generaciones.
“De esta forma, la biodiversidad resulta de vital importancia para el ambiente y para la producción de alimentos ya que estamos en una situación crítica en la cual necesitamos llegar a producir alimentos seguros para una población en constante crecimiento. Es por eso que es una de las estrategias claves que tenemos que apoyar desde Bayer si queremos seguir nuestro compromiso de, salud para todos, hambre para nadie”, concluyó Galo Benedit.