No es ningún secreto que tanto gerentes como empleados han estado sufriendo de agotamiento durante mucho tiempo, y hay múltiples factores que contribuyen a ese cansancio mental.
Los factores específicos que provocan el agotamiento son diferentes para cada persona. A continuación, se presentan algunas preguntas reflexivas que puede hacerse para identificar sus principales causas dentro de cada faceta del agotamiento.
Sensación prolongada de agotamiento
Esto va más allá de estar cansado al final de la semana, o incluso al final de una temporada alta. Se trata de una sensación de agotamiento o fatiga total que se deriva de una sobrecarga durante un período prolongado, sin períodos de recuperación adecuados o regulares. Si se siente constantemente agotado, pregúntese lo siguiente.
- ¿Cuáles son una o dos cosas que me han resultado más agotadoras o estresantes?
- ¿Qué me ha impedido descansar adecuadamente o tomar descansos regulares?
- ¿Qué es lo que me da energía y ha estado ausente en mi trabajo o vida?
La pérdida de energía que conlleva el agotamiento puede deberse a expectativas poco razonables por parte de su gerente (o incluso de un cliente) que necesitan ajustarse. O puede que el perfeccionismo o la renuencia a pedir ayuda lo estén llevando a trabajar más de lo necesario, generando trabajo extra y estrés.
Ineficiencia personal
Cuando uno se siente como Sísifo, empujando la misma roca cuesta arriba todos los días en el trabajo, sólo para que vuelva a rodar cuesta abajo, no sólo genera grandes sentimientos de frustración, sino que también disminuye en gran medida cualquier sensación de logro, productividad o significado que podamos obtener de nuestro trabajo.
Para saber qué es lo que le impide tener una mayor sensación de eficacia o le crea fricciones innecesarias, pregúntese lo siguiente.
- ¿Dónde siento que soy menos eficaz?
- ¿Qué es lo que más me frustra o se interpone en mi camino?
- ¿Qué me está consumiendo más energía de la que debería?
Estos sentimientos de ineficacia pueden ser el resultado de exceso de burocracia que ralentiza las cosas o crea fricciones innecesarias a la hora de hacer cosas aparentemente sencillas. Del mismo modo, algunos equipos u organizaciones pueden estar excesivamente impulsados por el consenso, lo que resulta en una proliferación de decisiones y reuniones que se prolongan sin cesar, cuando en realidad no es necesario que todos estén de acuerdo.
Distanciamiento mental
El último rasgo distintivo del agotamiento es esencialmente la falta de compromiso, caracterizada por sentimientos de cinismo o negatividad hacia el trabajo. Si bien, cierto distanciamiento mental del trabajo puede ser saludable (como poner el trabajo en perspectiva y no involucrar demasiado su identidad en él) este tipo de retraimiento o distancia mental del trabajo es más pronunciado y puede manifestarse como antipatía.
Si se encuentra experimentando este tipo de retraimiento mental de su trabajo, pregúntese lo siguiente.
- ¿Qué me hace sentir negativo o cínico?
- ¿Qué es lo que solía disfrutar de mi trabajo y que ya no disfruto ahora?
- ¿Cuándo se produjo este cambio y qué lo impulsó?
Puede ser más difícil identificar o articular respuestas a estas preguntas y probablemente requerirá una reflexión más profunda para analizar qué está causando este distanciamiento mental. Las respuestas también pueden estar influenciadas por algunas de sus respuestas a las preguntas anteriormente enumeradas.