Hay dos rasgos que sobresalen en Victoria Beckham. Uno, el que más prensa acaparó en los últimos tiempos es su inesperado y reciente sentido de la moda; el otro, su extrema delgadez. La esposa de David Beckham siempre se mantuvo reacia a hablar del tema pero en los últimos tiempos hasta se animó a reírse de las medidas extremas que toma para mantenerse flaca. Uno de sus hábitos es el consumo de vinagre de manzana. Aparentemente toma dos cucharaditas disueltas en agua todas las mañanas con el estómago vacío porque al parecer, el vinagre acelera el metabolismo y elimina toxinas.
Su dieta diaria consta de un smoothie verde como desayuno, cereales orgánicos y frutos rojos. Para el almuerzo y cena una pequeña ración de proteína (por lo general pescado) y ensalada.
A su dieta "blanqueada" se le suma que el chef de las celebridades Wolfgang Puck reveló hace poco que Victoria, su "clienta tensa", como la llama, solo pide espinacas al vapor u otros vegetales cuando va a su restaurante de Los Ángeles. Puck, que es famoso por cocinar hace 22 años para la ceremonia de los Oscars, contó además que Victoria es poco amistosa con los demás comensales, aunque su marido David es amable y le encanta hablar.
El especialista fue el encargado del catering de la fiesta que la pareja organizó cuando David empezó a jugar en LA Galaxy y se mudaron a California."Es tensa, todo tiene que estar bien y no le interesa hablar con nadie", contó Puck a la revista Heat. Y agregó: "solo come espinacas con un poquito de sal".
Puck también contó que cocinar para multitud de los Oscar "requiere una gran cantidad de comida porque algunos actores hacen dos o tres días de ayuno antes de la ceremonia".
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