Los adolescentes en Estados Unidos parecen haber alcanzado un nuevo nivel de conexión con el mundo digital. Esta premisa se respalda con un informe del Pew Research Center que indica que casi la mitad de ellos está online “casi constantemente”. Este auge de la hiperconectividad no solo cambia la manera en que interactúan entre sí, sino también cómo acceden a la información. Los dispositivos ya no son simples accesorios, sino una extensión de su día a día, y las redes sociales se han apoderado de sus conversaciones, pensamientos y, por supuesto, su tiempo.
El estudio, realizado entre septiembre y octubre de 2024, muestra que YouTube sigue siendo la plataforma más utilizada por los adolescentes, con un 90% de ellos afirmando que la utilizan. Aunque ha habido una ligera caída en comparación con el 95% registrado en 2022, sigue siendo el referente de las plataformas digitales para los jóvenes. Además, el 73% de ese público declara que acceden a la plataforma de forma diaria, subrayando la importancia de este espacio en sus rutinas.
Por otro lado, plataformas como TikTok, Instagram y Snapchat también continúan siendo populares entre los adolescentes, aunque muestran una ligera disminución en su uso.
TikTok, por ejemplo, es utilizado por el 63% de los adolescentes, una caída respecto al 67% del año anterior. Snapchat sigue siendo relevante, aunque también ha experimentado una baja del 59% al 55%. Estos descensos no son lo suficientemente significativos como para generar alarma, y podrían estar relacionados con el regreso a actividades presenciales tras el fin de las restricciones pandémicas.
El descenso más marcado se ha dado en el uso de X (antes Twitter). Solo el 17% de los adolescentes utiliza esta plataforma, una reducción notable en comparación con el 23% registrado en 2022, justo después de la compra de Elon Musk. Esta caída ha sido una de las más significativas entre las principales redes sociales. Reddit, en cambio, ha mantenido su popularidad, con un 14% de los adolescentes utilizándola, mientras que Threads, la respuesta de Meta a X, tiene una presencia mínima, con solo un 6% de los adolescentes usándola.
El informe también refleja diferencias importantes en el uso de plataformas según el género y la etnia. TikTok es utilizado con mayor frecuencia por las adolescentes: el 19% de ellas acceden casi constantemente a la plataforma, frente al 13% de los varones. En cambio, los chicos prefieren YouTube, con un 19% de ellos usándola casi constantemente, mientras que solo el 11% de las chicas lo hace.
Con respecto a la etnia, el 28% de los adolescentes negros y el 25% de los adolescentes hispanos afirman usar TikTok casi constantemente, frente al 8% de los adolescentes blancos. También es notable que los que conforman el primer grupo son más propensos a utilizar YouTube e Instagram con la misma frecuencia.
En tanto, el acceso a la tecnología entre los adolescentes de Estados Unidos es casi universal. Según el informe, el 95% de los adolescentes posee un teléfono inteligente, y el 88% dispone de una computadora de escritorio o portátil. Este nivel de conectividad resalta cómo los dispositivos digitales se han integrado completamente en la vida cotidiana de los jóvenes.
Este acceso masivo a la tecnología ha generado preocupaciones sobre los efectos de las redes sociales y los teléfonos inteligentes en la salud mental de los adolescentes. Los expertos advierten sobre el impacto potencial de las redes sociales en el bienestar emocional de los jóvenes.
Sin embargo, el informe también refleja la importancia de seguir investigando estos efectos, ya que la relación entre el uso digital y la salud mental no siempre es clara. El estudio subraya que, mientras las plataformas digitales ofrecen ventajas en cuanto a comunicación e información, también plantean interrogantes sobre sus consecuencias en el desarrollo psicológico de los adolescentes.
A nivel global, algunos países están adoptando enfoques regulatorios para gestionar el uso de las redes sociales entre los menores de edad. En Australia, por ejemplo, se aprobó recientemente una ley que prohíbe el uso de redes sociales a los menores de 16 años.
No obstante, el informe señala que, aunque esta legislación busca proteger a los jóvenes, las implicaciones de la implementación de tales restricciones son inciertas. “No está claro cómo se hará cumplir el límite de edad y si esto podría tener consecuencias no deseadas, como aislar a los niños vulnerables de sus compañeros”, advierte el estudio.
El informe también destaca que, a pesar de las preocupaciones sobre la salud mental y la regulación, WhatsApp, el servicio de mensajería de Meta, ha visto un aumento en el uso entre los adolescentes, pasando del 17% al 23% en 2022. Este aumento es notable, y representa una excepción dentro de un panorama general de declive en el uso de algunas plataformas. Este fenómeno subraya que, a pesar de las fluctuaciones en la popularidad de las redes sociales, algunos servicios logran mantener o incluso incrementar su uso entre los jóvenes.
El informe se basa en una encuesta realizada entre 1.391 adolescentes estadounidenses, con edades comprendidas entre los 13 y 17 años, entre el 18 de septiembre y el 10 de octubre de 2024. Esta muestra fue obtenida mediante paneles en línea administrados por Ipsos, lo que permite garantizar la representatividad de la población adolescente estadounidense en términos de características demográficas.