Una mujer asesinó a su pareja, la desmembró con una motosierra e intentó escaparse con el hijo

La comunidad de Slocomb, en Alabama, Estados Unidos, quedó sacudida por la noticia: Joselina Elizabeth López, una joven de 26 años, fue arrestada, acusada de asesinar brutalmente a su pareja, Benito Morales Guzmán, de 41 años. La mujer, quien había vivido junto a la víctima en una pequeña casa de la localidad, fue detenida el 29 de agosto, dos días después del hecho, y presentada ante la justicia.

El cuerpo del hombre apareció desmembrado y decapitado dentro de un auto estacionado en la propiedad que compartía con López, según la revista estadounidense People. La escena con la que se toparon los oficiales al llegar era tan estremecedora que dejó consternado al propio equipo de investigación.

Tras recibir una llamada del jefe de Guzmán, preocupado por su ausencia en el trabajo, los agentes acudieron a la casa el 27 de agosto. Al acercarse al lugar, el olor a descomposición proveniente de un auto los alertó de lo peor.

Dentro del vehículo, distribuidos en bolsas de basura, se encontraban los restos de Guzmán, repartidos entre el asiento trasero y el maletero. Junto a las bolsas, las autoridades hallaron una motosierra eléctrica, cuchillos y productos de limpieza, indicios del intento de ocultar el crimen, según el medio local AL.com.

La motosierra, uno de los elementos claves en la investigación, todavía tenía restos humanos adheridos, un detalle que dejó claro el nivel de violencia empleado en el asesinato, indicó el mismo medio. Según reveló más tarde el informe forense, el cuerpo de Guzmán había sido mutilado en múltiples pedazos probablemente para deshacerse del cadáver.

“Llegué al lugar y rápidamente supe que este iba a ser un caso muy difícil”, dijo el policía a cargo en el condado de Ginebra, Tony Helms, según el medio estadounidense WDHN.

Dentro de la vivienda, los investigadores también localizaron un revólver, con cinco de sus seis cartuchos descargados. Posteriormente, durante la autopsia, se extrajeron dos balas del cuerpo de Guzmán, lo que reveló que antes de ser desmembrado, había sido asesinado a tiros.

El hecho de que López hubiera adquirido cuatro motosierras antes del crimen, de las cuales devolvió una, solo incrementó las sospechas sobre la premeditación del acto. “Desmembrar un cuerpo en un intento de deshacerse de él nuevamente es algo inusual y no sucede muy a menudo por aquí”, aseguró Helms en WDHN.

La pareja tenía un hijo de cuatro años con autismo, que podría haber estado presente durante el asesinato, según algunas conclusiones preliminares. La evidencia sugiere que López estaba preparando su huida con el menor: en otro vehículo de la propiedad, las autoridades encontraron un asiento de seguridad para niños, además del certificado de nacimiento y el pasaporte de ella.

Durante su comparecencia ante el tribunal, la mujer afirmó que había actuado en defensa propia. Según los registros judiciales, López intentó justificar la brutalidad del crimen argumentando que su vida estaba en peligro, pero los fiscales encontraron suficientes indicios para contradecir esa afirmación.

Ante la gravedad del caso y la posibilidad de fuga, el juez del Tribunal de Circuito del Condado de Ginebra, Stephen Smith, tomó la decisión de negarle la libertad bajo fianza. Durante la audiencia, la fiscalía reveló que la mujer tiene familia en México y Guatemala, lo que reforzó el temor de que intentara escapar del país para evitar el juicio, según AL.com. De hecho, de acuerdo con registros judiciales, durante una conversación telefónica con un familiar desde la cárcel, López dijo: “Debería haberme ido antes”, una declaración que aumentó la sospecha de las autoridades sobre su intención de huir.

El caso sigue en pleno desarrollo. A pesar del arresto de López y las evidencias encontradas, las autoridades advirtieron que la investigación está lejos de concluir. Helms expresó su escepticismo sobre el cierre rápido del caso, y aseguró que, debido a su complejidad, es probable que pasen varios meses antes de que todas las pruebas se procesen completamente y se presenten los cargos definitivos.

Hasta advirtió que podría enfrentar cargos adicionales, más allá de los de asesinato, por la exposición de su hijo a la escena del crimen y la posible premeditación del acto. “Si logramos que se lleve a juicio dentro de un año, me sorprendería”, sentenció Helms en WDHN.