En la tranquila ciudad de Spotsylvania, Virginia, una sombra oscura acechaba sin ser vista. Richard Evonitz, un hombre que a simple vista parecía llevar una vida común, ocultaba un monstruo interno capaz de los crímenes más atroces. Tras la fachada de un exmarino disciplinado y vendedor de éxito, Evonitz escondía una trayectoria de violencias que culminaría en una serie de asesinatos y secuestros que conmocionaron a toda una nación. Este es el relato de un asesino en serie y de las mujeres cuyas vidas transformó para siempre.
Bonnie Lou Gower y su matrimonio con Richard Evonitz
Bonnie Lou Gower, una mujer que había conocido a Evonitz a través de su hermana menor, jamás sospechó del abismo en el que se estaba adentrando cuando se casó con él a los 17 años. Su matrimonio, que duró hasta que ella cumplió 25, estuvo marcado por un control insidioso y un desmoronamiento gradual de su autoestima. Bonnie recuerda cómo, al principio, asumió las tareas del hogar con devoción, deseando complacer a su esposo militar.
Sin embargo, las cosas cambiaron rápidamente. “Empezó a molestarme por mi peso, diciendo que estaba gorda y que necesitaba unirme a Weight Watchers (una compañía que ofrece ayuda para mantener el peso o mejorarlo a ciudadanos), relató hace poco Bonnie en TikTok, donde su historia ha acumulado más de 10 millones de vistas.
Fue años después de su divorcio, estando casada con su segundo esposo, que Bonnie recibió una llamada del FBI que se reveló la verdadera naturaleza de Evonitz: había asesinado a tres adolescentes. Esta revelación la sacudió hasta la médula, pero aún más aterrador fue descubrir, dos décadas después, que esos no fueron los únicos crímenes de su exmarido. Bonnie ahora busca publicar un libro donde detalle su matrimonio con el asesino, una historia que aún sigue resonando en los rincones más oscuros de su memoria.
Secuestro y escape de Kara Robinson Chamberlain
El 24 de junio de 2002, la vida de Kara Robinson Chamberlain cambió para siempre. Mientras regaba las flores en el jardín de la casa de su amiga en Columbia, Carolina del Sur, un desconocido se acercó con una excusa trivial. Richard Evonitz, armado, la obligó a entrar en una caja de plástico en el asiento trasero de su auto. Kara, una adolescente de 15 años, mantuvo la calma de manera asombrosa.
“Mi capacidad para escapar fue parte de mi respuesta al trauma,” explicó años después en Tik Tok. Dentro del apartamento de Evonitz, Kara fue drogada y abusada sexualmente, pero nunca dejó de observar su entorno. Identificó marcas, objetos y detalles que podrían ser cruciales para su supervivencia.
La mañana siguiente, mientras su captor dormía, Kara utilizó sus dientes para liberar el clip que la mantenía esposada a la cama. “Simplemente corrí,” recuerda en Tik Tok. Descalza y sin mirar atrás, se dirigió a un coche estacionado y suplicó a los ocupantes que la llevaran a la estación de policía. Su valentía le salvó la vida y como si fuera poco puso fin a la carrera criminal de Evonitz.
Las víctimas anteriores de Richard Evonitz
Los horrores que Kara ayudó a revelar no eran los primeros. Richard Evonitz ya había marcado una trágica huella en Virginia. En septiembre de 1996, Sofía Silva, de 16 años, fue secuestrada de su jardín en Spotsylvania. Un mes después, su cuerpo en descomposición fue encontrado en una cañada. Menos de un año después, en mayo de 1997, las hermanas Kristin y Kati Lisk, de 15 y 12 años, fueron raptadas frente a su escuela. Evonitz las agredió sexualmente, las estranguló y arrojó sus cuerpos al río South Anna, donde fueron halladas cinco días después.
Vida y antecedentes de Richard Evonitz
Richard Evonitz no siempre fue el hombre temido que la nación llegaría a conocer. Nacido el 29 de julio de 1963 en Columbia, Carolina del Sur, su infancia estuvo marcada por un ambiente familiar difícil, con un padre controlador y una serie de comportamientos violentos que comenzaron a temprana edad. A los ocho años, casi estranguló a su hermana menor. En su juventud, sus crímenes incluyeron la exposición indecente y la falsificación de cheques. Después de unirse a la Marina, su conducta solo se volvió más siniestra. En 1995, cometió su primer ataque sexual violento conocido, violando a una niña de 13 años en su hogar.
Suicidio de Richard Evonitz
El 27 de junio de 2002, tras la denuncia de Kara, la policía rastreó a Evonitz hasta Sarasota, Florida. En un intento desesperado por escapar, se produjo una persecución a alta velocidad que terminó cuando fue acorralado por las autoridades. Evonitz, viendo el final de su camino, optó por una salida final: se suicidó disparándose.
El impacto de los crímenes de Richard Evonitz sigue resonando. Kara Robinson Chamberlain, sobreviviente y ahora madre de dos hijos, se ha convertido en una figura pública que utiliza su experiencia para educar y apoyar a otros sobre el trauma y la recuperación. A través de conferencias y redes sociales, comparte su historia para que otros puedan encontrar esperanza y fuerza en su lucha.
A pesar de la captura y muerte de Evonitz, las cicatrices de sus actos permanecen. Las familias de sus víctimas, tanto conocidas como posibles casos no resueltos, continúan buscando respuestas y justicia. La historia de Richard Evonitz es un recordatorio sombrío de cómo una vida aparentemente normal puede esconder un terror indescriptible, y cómo la valentía y la perseverancia pueden llevar a la luz incluso en los momentos más oscuros.