La ex esposa de Elon Musk reveló los secretos del magnate para enfrentar el estrés extremo

El mundo de los emprendedores y magnates tecnológicos está lleno de desafíos y tensiones constantes. Sin embargo, algunas personas, como Elon Musk, CEO de Tesla y SpaceX, parecen manejar el estrés de manera extraordinaria. Según su exesposa, Justine Musk, la clave está en cómo se aborda y se transforma este estrés en algo positivo.

En una respuesta a una pregunta en Quora sobre cómo alcanzar el nivel de éxito de figuras como Bill Gates, Steve Jobs o Richard Branson, Justine compartió sus ideas.

“El éxito extremo resulta de una personalidad extrema y tiene un costo en muchas otras áreas”, dijo, en declaraciones recogidas por Forbes. No es suficiente con ser talentoso; es necesario ser obsesivo. En palabras de Justine, hay que “estar obsesionado, estar obsesionado, estar obsesionado”.

Según la expareja del dueño de X, las personas exitosas son aquellas que se enfocan en sus fortalezas únicas y explotan esas características de manera efectiva. Son individuos con puntos de vista audaces que transforman sus debilidades en ventajas y buscan alianzas con personas que complementen sus carencias.

Justine ofreció una perspectiva interesante sobre cómo manejar el estrés, basada en los ocho años que estuvo casada con el fundador de Neuralink. La clave, según ella, no es evitarlo, sino aprender a manejar niveles de estar estresado, que “romperían” a la mayoría de las personas.

Según explicó, Musk no busca reducir el estrés; en su lugar, expande su zona de confort y redefine lo que considera estresante. Para ello, su primer paso es encontrar un propósito.

La escritora mencionó que se debe seguir las obsesiones hasta que emerja un problema grande y desafiante que afecte a muchas personas y tratar de resolverlo a toda costa. Es un juego a largo plazo que puede tomar años de exploración y aprendizaje.

Las personas extremadamente exitosas, como Musk, enfrentan el estrés de manera directa y no dejan que el miedo al fracaso las detenga. Según Justine, estas personas no temen al fracaso o, si lo hacen, avanzan de todos modos. Además, aprenden a redefinir el fallar hasta que ya no lo perciban como tal. Esta capacidad les permite adquirir conocimientos y experiencias únicas que otros no obtendrán nunca.

“El fracaso público y espectacular es algo común en estas personas, pero encuentran formas de reinterpretarlo hasta que deja de ser un fracaso”, sostuvo. Esta actitud les proporciona una increíble resistencia y determinación, ya que saben que “la presión rompe huevos, pero también crea diamantes.”

Aceptar que los problemas y desafíos vendrán continuamente al construir un negocio, aumentar la audiencia y superar los límites del potencial propio es esencial. Justine aseguró que el estrés no tiene que quebrar a las personas, al igual que alguna noticia adversa o problemas económicos. Aseguró que la ira, el miedo y la ansiedad no deben formar parte del mundo de un emprendedor que busca hacer una diferencia.