El Sena será el lugar de la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos: por qué estuvo prohibido bañarse un siglo y qué cambia en 2025

El río parisino acogerá diferentes competiciones acuáticas durante los Juegos Olímpicos, ya que los análisis realizados confirman que el agua es “apta para el baño”

Guardar
 Reuters 163
Reuters 163

El Sena, famoso río que atraviesa París, ha sido centro de numerosos comentarios a lo largo de los años, principalmente relacionados con su contaminación y acumulación de residuos. Esta reputación ha mantenido a los parisinos alejados de sus aguas durante décadas. En 1990, Jacques Chirac, entonces presidente y alcalde de París, prometió que se bañaría en el Sena, una promesa que quedó sin cumplir. Sin embargo, Anne Hidalgo, actual alcaldesa, está decidida a cambiar la historia. Este miércoles 17 de julio de 2024, Hidalgo se ha lanzando a las aguas del Sena junto a Tony Estanguet, presidente del comité organizador de los Juegos Olímpicos.

Este acto, más simbólico que práctico, tendrá lugar pocos días antes de las primeras pruebas de triatlón en el Sena. Hidalgo ha asegurado que, según los últimos análisis, el Sena es “apto para el baño”, algo que no se había oído en décadas. Bañarse en el Sena era una actividad común hasta 1923, cuando un decreto lo prohibió debido a la contaminación y al tráfico fluvial. A partir de entonces, bañarse en el Sena se convirtió en una actividad ilegal.

A comienzos del siglo XX, el Sena era un sitio popular para el ocio acuático. La gente se aglomeraba bajo el puente de Jena y en otros puntos del río, disfrutando de un día de baño. En 1913, por ejemplo, era común ver a personas saltando al río desde trampolines improvisados. Incluso se realizaron acrobacias, como atravesar el río en bicicleta o flotar en camas improvisadas.

La contaminación en el Sena

Ya en el siglo XIX, empezaron a surgir preocupaciones sobre la limpieza del agua del Sena. En 1867, se prohibió nadar directamente en el río, permitiendo sólo el uso de piscinas flotantes que utilizaban agua del Sena. Para 1887, la percepción pública del río ya era negativa, ya que los periodistas franceses describían el agua como “fangosa y venenosa”. En 1921, dos años antes de la prohibición oficial, algunos investigadores intentaron calmar los temores de la población, aconsejando a los bañistas cerrar la boca mientras nadaban y lavarse bien después de salir del agua. También recomendaban vacunarse contra enfermedades como la fiebre tifoidea para evitar complicaciones.

Las aguas del Sena fueron
Las aguas del Sena fueron aptas para el baño diez de los últimos doce días (EFE/ Helena Sánchez)

Competiciones deportivas en un Sena contaminado

Aunque el Sena estaba contaminado, esto no impidió que se llevaran a cabo competiciones deportivas. En los Juegos Olímpicos de 1900, las pruebas de natación se realizaron en sus aguas. En 1906, se inauguró la “Coupe de Noël”, un evento donde nadadores atravesaban el río en invierno. En 1913, se celebraron los campeonatos de Francia de salto en el Sena, aguas abajo de la Torre Eiffel.

A pesar de la prohibición oficial de 1923, los parisinos continuaron nadando en el río hasta los años 60. En 1943, se permitió una excepción para que cincuenta nadadores cruzaran el Sena en una competición. En 2024, una nueva excepción será hecha para los triatletas olímpicos.

El Sena volverá a ser apto para el baño

La alcaldesa de París se baña en el Sena junto a Tony Estanguet antes de los Juegos.

De cara a 2025, se están realizando importantes esfuerzos para limpiar y recuperar el Sena, con el objetivo de que vuelva a ser seguro para el baño. La ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos en el Sena marcará un hito en esta transformación. El evento no solo será un espectáculo visual, sino también una declaración sobre el compromiso de París con la sostenibilidad y la recuperación ambiental.

De acuerdo con la página del Ayuntamiento de París, será posible bañarse en el Sena en 2025, pero solo en áreas delimitadas y durante el verano, aprovechando las condiciones meteorológicas favorables para la calidad del agua. En concreto, se dispondrán tres zonas: Bras Marie, situado en la orilla derecha frente a la isla de San Luis; la orilla de Bercy y el puerto de Grenelle.

Guardar