Zaragoza, 11 dic (EFE).- La alpinista Edurne Pasabán y el esquiador extremo Aymar Navarro han sido los primeros deportistas del ámbito montañero en respaldar el manifiesto presentado este miércoles por la Asociación Española de Municipios de Montaña, EsMontañas, que destaca “el impacto positivo de la conexión con la naturaleza en la salud mental y el bienestar de las personas”.
Este documento, en el marco del 'Día Internacional de las Montañas' que se celebra este miércoles, ha sido respaldado por más de 300 municipios españoles de montaña, personalidades del mundo del deporte, y la comunidad científica universitaria, según señalan desde la citada asociación, e insta a incluir la "prescripción de naturaleza" en las políticas sanitarias y en la vida cotidiana de la ciudadanía.
“Queremos que la naturaleza sea vista, no solo como un recurso de ocio sino como un elemento esencial para la salud y el bienestar de las personas. Las evidencias científicas son claras: el contacto regular con espacios naturales reduce el estrés, mejora la salud mental y fomenta la actividad física”, explican desde EsMontañas.
Pasabán y Navarro, que son embajadores de esta iniciativa, han compartido un vídeo sobre cómo la conexión con la montaña ha transformado sus vidas.
“Las montañas me han dado serenidad y fortaleza, ayudándome a superar momentos difíciles. Estoy convencida de que pueden ser una herramienta poderosa para mejorar nuestra salud mental”, ha indicado Pasabán.
Por su parte, Navarro destaca que vivir y entrenar en la montaña le ha enseñado que el contacto con la naturaleza "no solo es terapéutico, sino vital para nuestro equilibrio físico y emocional”.
El manifiesto no solo busca concienciar de los beneficios saludables de la conexión con la montaña sino también movilizar a actores clave de la sociedad española para que se adhieran a la iniciativa.
Entre las propuestas de EsMontañas destaca la incorporación de Programas de prescripción de naturaleza en el Sistema Nacional de Salud (SNS), así como la promoción de actividades al aire libre desde los ámbitos institucional, educativo, empresarial y cultural.
“Este es un movimiento inclusivo que une municipios, científicos, deportistas y ciudadanos en un objetivo común: cuidar la naturaleza para cuidarnos a nosotros mismos”, matizan.
Amparo Oliver, catedrática y directora del grupo de investigación ARMAQoL (Advanced Research Methods Applied to Quality of Life Promotion) de la Facultat de Psicologia i Logopèdia de la Universitat de València (UV), suma al manifiesto las evidencias científicas de prescribir naturaleza, a partir de las conclusiones de investigaciones recientes que demuestran sus beneficios.
Así, explica que en un meta-análisis de 971 investigaciones se confirma que integrar espacios naturales en la vida diaria puede disminuir el cortisol, el estrés, las visitas a centros de salud y reducir los costes sanitarios. "Esto no es solo un beneficio individual sino un avance colectivo”, explica Oliver.
Según recuerda la catedrática, en Japón ya se estudia desde 2004 la medicina forestal a través de la Green Social Prescription, “en lugar de prescribir fármacos, recetan estancias, excursiones o actividades a la naturaleza con un componente social”.
Oliver va más allá al afirmar las investigaciones demuestran que estas prácticas pueden significar “un recorte de hasta el 42 % en consultas básicas y en una disminución de un 23 % en accidentes y emergencias”.
La reducción del estrés y los síntomas de ansiedad, la mejora de la salud mental en episodios de depresión leve y el aumento de la actividad física, con impacto positivo en la salud cardiovascular, son otros de los beneficios detectados por las investigaciones universitarias.
La Asociación Española de Pueblos de Montaña, EsMontañas, que aglutina 300 pueblos de montaña españoles, invita a instituciones, empresas y ciudadanos a sumarse al manifiesto y contribuir "a una sociedad más saludable y equilibrada”. EFE