Londres, 24 oct (EFE).- Charlie Watson, un joven de 19 años que milita en el Threave Rovers, de la Cuarta división escocesa, sigue jugando al fútbol pese a padecer un cáncer de piel en etapa cuatro.
Watson jugará este viernes en la segunda ronda de la Copa Escocesa contra el Stranraer, un año después de que le diagnosticaran un melanoma maligno que ahora se encuentra en etapa cuatro y que se ha extendido a sus pulmones, hígado y nodos linfáticos.
"Tenía un bulto en el abdomen que empezó a hacerse cada vez más grande, así que le pedí a mi doctor que me lo quitara. Un par de semanas más tarde me dijeron que el bulto era un tipo de cáncer de piel", dijo Watson en la cadena británica BBC.
"Fue un shock. Cuando tienes mi edad (entonces tenía 18 años) no te esperas recibir esta clase de noticia", explicó el futbolista, que también añadió que recibe como tratamiento un tipo de inmunoterapia por el que se tiene que tomar dos tipos de medicación, una doble durante cuatro semanas, con seis de descanso, y otra individual por dos años cada cuatro años.
El mes pasado, en la primera ronda de la Copa Escocesa, Walton anotó el último gol en la victoria por 6-1 contra Vale of Leithen.
"No siento pena de mí. Soy la clase de persona que acepta lo que le ocurre", dijo el jugador, que tendrá la oportunidad de verse este viernes por primera vez en televisión porque el partido lo transmitirá la BBC.
"Solo tiene 19 años y solo pensar en todo lo que le está pasando es muy duro. Si le ves en el campo, no te lo puedes creer. No creo que se haya perdido un entrenamiento y durante los partidos nunca se le ve fuera de lugar o sufriendo. Como mucho podría decir que cada vez está mejor", agregó su entrenador, Danny Dunglinson.
Su madre, Amanda Woods, contó que es un ser humano "increíble" que lo está llevando muy bien. "Sigue jugando al fútbol y es una persona muy dedicada y con una mente muy fuerte. Me cambiaría por él sin pensarlo", dijo. EFE