La necesidad de que el entorno laboral se convierta en un escudo ante el trastorno mental

La importancia de evaluar la salud mental en el trabajo para prevenir trastornos, potenciar el bienestar laboral y facilitar la reintegración de empleados tras bajas por problemas mentales

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Madrid, 6 oct (EFE).- Los "grandes" ámbitos de prevención del deterioro de la salud mental son la familia, el colegio y el trabajo, según los expertos, que reclaman que en el caso de este último, las empresas evalúen no solo la salud física de los trabajadores sino también la mental para tratar de ayudar a la detección precoz de los casos.

Cada 10 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Salud Mental, promovido por la Federación Mundial de la Salud Mental, que centra este año el interés en el trabajo, ya que éste en ocasiones es "fuente" de trastornos mentales pero también supone un "aliado" para salir del pozo.

Lo aseguran a EFE los presidentes de la Sociedad Española de Psiquiatría y Salud Mental (SEPSM) y la Confederación Salud Mental España, Manuel Martín y Nel González, respectivamente, quienes recuerdan que desde la pandemia las bajas laborales por trastornos mentales comunes, como la ansiedad o la depresión, "han aumentado muchísimo".

Los riesgos para la salud mental en el trabajo dependen mucho de la naturaleza de éste, ya que hay entornos más complicados, pero también de las personas, porque las hay que son más vulnerables, explica el presidente de la SEPSM.

"Es una combinación de las dos cosas", afirma Martín, de forma que juegan mucho factores tales como el puesto de trabajo, el salario, las condiciones, la organización, la carga laboral pero también la comunicación, la equidad, o la motivación de la persona con el grupo, entre otros.

El hecho de que el trabajo en ocasiones sea el origen del trastorno mental, hace que Nel González haga una llamada de atención porque considera que el problema es una cuestión no solo de las personas, también de las empresas.

"En primer lugar, nosotros reivindicamos que en la ley de prevención de riesgos laborales se incluya la evaluación psicológica necesaria de los trabajadores para detectar lo antes posible los casos,", afirma el presidente de la Confederación, quien destaca la importancia de que el trabajador se encuentre bien en su puesto.

Sobre ello, incide en que está demostrado que los trabajadores que tienen un buen ambiente de trabajo y se sienten considerados aumentan su rendimiento.

"Por eso las empresas deben de empezar a preocuparse también de ello y no solamente de contabilizar las bajas laborales, que a veces esas bajas se deben a la escasa atención al bienestar de la gente", abunda.

En el mismo sentido se pronuncia el presidente de la SEPSM quien resalta la necesidad de que el entorno laboral pueda hacer una "labor preventiva" por un lado y de detección precoz, por otro, ya que es en el trabajo "normalmente, donde primero se nota" que la salud mental de la persona no va bien, con signos como la pérdida de productividad, entre otros.

"Los grandes ámbitos de prevención son la familia, el trabajo y el colegio. Es allí donde habría que hacer la labor más importante", subraya el presidente de la SEPSM, quien defiende que el trabajo aunque a veces no lo es, otras es un "aliado" para la salud mental.

De hecho, abunda en que una "gran reivindicación" que se hace siempre desde la Psiquiatría es la posibilidad de que las personas con enfermedad mental grave tengan la opción de trabajar, porque "no hay normalización sin un empleo".

Por otra parte, tanto González como Martín defienden que una vez que la persona que ha estado de baja por un trastorno mental se reincorpora, lo ideal es que pueda hacerlo de una forma progresiva, como una especie de adaptación.

Martín aclara que es consciente de que no es lo mismo una pequeña empresa con pocos empleados que una multinacional, pero insiste en que, al menos, "como filosofía en general, sí que debería existir, porque contribuiría al bienestar de la persona".

"Por ejemplo, un médico que se reincorpora tras una baja por depresión, pues en un principio, una medida bastante prudente puede ser que no haga guardias, porque éstas implican no dormir y si la persona no duerme bien es un factor de recaída", expone el presidente de la SEPSM.

Para Nel González el reincoporarse de una baja por trastorno mental supone también un estigma, como si fuera "una persona más débil o poco fiable", por eso, a su juicio, no solo hay que garantizar legalmente que la vuelta al trabajo sea lo más amable posible sino también pedir a los compañeros "pedagogía social".

"Es cuestión también de solidaridad y de hacer ver que mañana te puede tocar a ti", zanja el presidente de la Confederación Salud Mental España. EFE

(Recursos de archivo en www.lafototeca.com. Código 21712149 y otros)

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