Estas son las tres vacunas que el Ministerio de Sanidad desaconseja para los adultos que cumplan con alguna de estas condiciones

El plan de vacunación de Sanidad para el 2025 forma parte de una estrategia más amplia para mejorar la salud pública

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Un trabajador sanitario prepara una
Un trabajador sanitario prepara una dosis de la vacuna contra la viruela símica en el centro municipal de vacunación Edison(Jocard/Pool vía REUTERS)

El Ministerio de Sanidad ha publicado una actualización del calendario de vacunación para 2025, incorporando medidas específicas dirigidas a adultos y niños con condiciones de riesgo. Estas recomendaciones, aprobadas por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, buscan optimizar la protección frente a enfermedades prevenibles como la hepatitis B, el meningococo o la gripe.

En este sentido, en esta última actualización también se ha advertido sobre los peligros de administrar ciertas vacunas a determinados grupos de riesgo.

Vacuna (El Observador)
Vacuna (El Observador)

Contraindicaciones clave en vacunas

Entre las pautas destacadas, el Ministerio desaconseja la administración de las vacunas contra la triple vírica y la varicela en mujeres embarazadas, personas con inmunodeficiencias y pacientes con infección por VIH en estadios avanzados. Estas restricciones se han aprobado de acuerdo a la naturaleza de las vacunas, que contienen virus atenuados, lo que podría representar un riesgo para la salud de los colectivos mencionados.

Recomendaciones para la administración de la triple vírica

La vacuna triple vírica, que protege contra el sarampión, la rubeola y las paperas, está contraindicada para los grupos mencionados, tanto en adultos como en menores. Antes de su administración, el Ministerio aconseja verificar el historial de vacunación del paciente.

Si no se ha completado la pauta, las recomendaciones incluyen:

  • Administrar dos dosis de la vacuna con un intervalo mínimo de cuatro semanas en personas no vacunadas previamente.
  • Aplicar una dosis adicional si ya se ha recibido una anterior.

Además, se hace énfasis en la importancia de esta vacuna para el personal sanitario, debido al riesgo elevado de exposición y transmisión de estas enfermedades. Por otra parte, su aplicación también está contraindicada para personas con antecedentes de una reacción grave (anafiláctica) a cualquier componente de la vacuna.

Precauciones con la vacuna contra la varicela

En el caso de la vacuna contra la varicela, también se requiere precaución en su administración. El Ministerio recomienda su uso exclusivamente en individuos seronegativos sin condiciones de riesgo que puedan recibir las dos dosis necesarias.

Para personas mayores de 18 años que no hayan padecido la enfermedad, se realizará un análisis serológico previo. Si este resulta negativo, se administran dos dosis con un intervalo de al menos cuatro semanas entre ambas. En el caso de haber recibido previamente una dosis, se completará la pauta con una única dosis adicional. Según el Ministerio, la inmunidad está garantizada en aquellos que hayan recibido dos dosis de la vacuna en cualquier momento previo.

Así pues, desde la autorización de la primera vacuna contra la varicela en España en 1998, se considera prioritaria la vacunación en individuos con enfermedades crónicas como trastornos metabólicos y endocrinos, enfermedades pulmonares o cardiovasculares crónicas, mucoviscidosis y alteraciones neuromusculares, que pueden predisponer a una varicela grave.

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Paralelamente, el plan de vacunación de Sanidad para el 2025 forma parte de una estrategia más amplia para mejorar la salud pública, haciendo hincapié en la protección de los colectivos más vulnerables. Las recomendaciones incluyen pautas específicas para otras vacunas, como la de la hepatitis B, destinada especialmente a personas con enfermedades crónicas o en riesgo, y la vacuna contra el meningococo, fundamental para prevenir infecciones graves en niños y adolescentes.

Este enfoque integral busca garantizar una cobertura adecuada, evitar complicaciones derivadas de enfermedades prevenibles y promover la seguridad en los procesos de vacunación.

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