Un niño de cuatro años se queda sin comer en el colegio por una deuda de 8 euros de sus padres: “Una situación vergonzosa”

Coger un par de horas libres entre la jornada laboral es bastante complicado para la gran mayoría de los padres. Por eso, los comedores escolares son una perfecta solución para aquellos que no pueden combinar las clases de sus hijos con su trabajo. Poder dejar a los estudiantes en manos de los auxiliares de comedor para que sus hijos coman, jueguen y estén cuidados supone un gran alivio para profesores y padres que podrán realizar sus tareas con tranquilidad.

Para cubrir los gastos que conlleve el comedor (trabajadores, cubiertos, comida...) se suele pagar una tasa, normalmente mensual, por el menú que se va a consumir durante los próximos días, algo que puede suponer un gran esfuerzo económico para aquellos padres que no pueden combinar el trabajo con el horario de comedor de sus hijos.

No pagar esta tasa se puede traducir en consecuencias contra el menor, como le ha pasado a un alumno de un colegio de Sulmona (Italia). Una escena muy triste, donde el niño quedó aislado mientras los demás compañeros comían. Advertido por los profesores, el padre tuvo que dejar su puesto de trabajo para ir corriendo a la escuela.

“Encontré a mi hijo llorando, humillado delante de toda la clase”, ha explicado el padre, que también es profesor, según ha informado Orizzontescuola.

“Como padre y como profesor estoy muy enojado”, ha añadido el padre. “Me pregunto si ambos padres no podrían haber acudido a la escuela. Dejar a un niño con el estómago vacío es un método intolerable”, ha señalado el padre.

Cuando el hombre llegó al colegio le informaron del motivo del bloqueo del servicio de comedor: el impago de los dos últimos vales de comida, una suma que ascendía hasta los 8 euros con 97 céntimos. Los profesores del niño de cuatro años intentaron darle algunos trozos de comida sobrantes, pero no pudieron conseguir que se comiera el segundo plato.

Por su parte, el progenitor ha mostrado sus mensajes en el portal de Ristocloud (empresa de restauración), donde no había llegado ningún aviso de advertencia de impago o saldo insuficiente.

Precisamente, este año, el Ayuntamiento de Sulmona ha endurecido sus normas de pago del comedor, eliminando el mensaje de texto que advertía a las familias de dinero insuficiente en sus cuentas. Una elección que parece aún más cuestionada a la vista de los retrasos en la activación del propio servicio de comedor en los colegios, que no ha funcionado hasta el 21 de octubre.

“En el caso de los días 7 y 8 de noviembre, la comida se administró regularmente, a pesar de que el sistema informó de un retraso, así como se garantizó el consumo del primer plato el siguiente lunes 11 de noviembre, según han confirmado los operadores de la escuela”, ha precisado el Ayuntamiento.

En cuanto a la (supuesta) falta de notificación a través de teléfonos móviles, también en este punto el desmentido fue total. Según el comunicado del Ayuntamiento a Il Corriere della Sera, de hecho, además de que “los padres pueden comprobar los posibles atrasos en tiempo real en el portal dedicado a ello, si el crédito se está agotando, el sistema informa a los padres mediante un mensaje de texto”.