El mundo marino es el ecosistema más abundante, inexplorado e importante de la tierra. Su mayor composición, el agua de mar, tiene una concentración única de minerales, y en los últimos meses se han promocionado algunos remedios basados en este elixir para mejorar la salud del organismo.
Sin embargo, esta no es una moda que pasará de largo en poco tiempo, ya que se han recogido ciertas referencias a épocas anteriores a Cristo sobre este uso del agua del mar. En ellas, se estima que algunos terapeutas empleaban el agua marina como una fuente curativa para diversas enfermedades, según destaca la publicación Sol natural.
Estos métodos se investigaron siglos más tarde para comprobar si estos beneficios eran reales. Concretamente, en el siglo XIX, el investigador francés René Quinton descubrió que la fórmula de este elixir era muy similar al medio en el que se reproducen las células humanas. Tras su hallazgo, determinó una teoría científica basada en las ventajas de una terapia marina para el cuerpo humano.
Las propiedades del agua de mar
Para confirmar los beneficios que puede dotar este elemento al organismo, es preciso conocer sus propiedades. Pero antes, es crucial señalar que el agua de mar que puede dotar una mayor tasa de ventajas es aquella que se recoge de los conocidos vórtices marinos. Estas zonas son propensas al afloramiento de plancton, que concede una riqueza mineral superior y una mayor cantidad de oligoelementos biodisponibles, según el Institut Respiratori.
De esta manera, el elemento estudiado presume de propiedades antibióticas y mucolíticas, encargadas de disolver mucosidades y microorganismos. Asimismo, posee un poder antiinflamatorio, alcalinizante, nutritivo y remineralizante, gracias al alto contenido de magnesio, calcio, potasio y sodio, entre otros. Además, cuenta con una amplia gama de oligoelementos y compuestos bioactivos que estimulan el sistema, así como acciones antioxidantes y cicatrizantes, gracias al selenio y el zinc, para el envejecimiento y el cuidado de la dermis.
Los beneficios de beber agua de mar
Gracias a las propiedades que posee el agua de mar, puede tener numerosos beneficios para la salud. En primer lugar, los minerales que dota este elemento puede ayudar al mantenimiento del equilibrio electrolítico y a la salud ósea y muscular. Igualmente, la ingesta adecuada de este agua puede aportar diversos nutrientes que el cuerpo precise, según la Clínica Cres.
Por su parte, el potencial alcalinizante contribuye al equilibrio ácido-base, lo que incrementa la prevención ante enfermedades que puedan atacar al organismo, como la acidosis metabólica. Asimismo, el consumo controlado del elemento marino incrementa los efectos inmunoestimulantes para el sistema. Debido a las propiedades antioxidantes, su consumo podría beneficiar al envejecimiento prematuro de la piel y de las células del organismo, por lo que ayudaría a disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas.
Qué enfermedades mejoran gracias al agua de mar
Tras analizar los beneficios del agua de mar en el metabolismo, se pueden conocer sus usos médicos, desde el tratamiento de los problemas cutáneos a las afecciones en los huesos y articulaciones. Así, la Fundación Rene Quinton ha detallado las enfermedades que pueden mejorar con este elixir.
En primer lugar, las personas que padezcan de gastroenteritis pueden ingerir este tipo de agua, pues actuaría como suero fisiológico. En cuanto a los problemas de la dermis, el tacto con el agua de mar acelera el proceso de cicatrización de heridas, así como la rehidratación de la piel.
Además, gracias a las propiedades antiinflamatorias puede reducir los síntomas de la sinusitis y rinosinusitis, por lo que se produciría una liberación de las vías aéreas, lo que también ayudaría a las personas hipoalérgicas. Igualmente, es potencialmente beneficioso para las personas con conjuntivitis, gracias al efecto de arrastre sobre los mediadores inflamatorios. Aunque este último se encuentra aún en estudios con animales, se están investigando sus beneficios en aquellos que tienen anemia.
Contraindicaciones de beber agua de mar
Para aquellas personas que decidan implementar este método a su rutina, es importante tener en cuenta que el agua de mar contiene altos niveles de sal, por lo que siempre se recomienda un consumo moderado en dosis que no superen el cuarto de litro al día. Por este mismo motivo, es conveniente ingerirla una vez haya pasado por un proceso de isotonización con agua dulce, concretamente en una proporción de que no supere la cuarta parte del envase.
Por su parte, las personas con hipertensión o problemas cardíacos no deberían incorporar este remedio, pues podría provocar un efecto contrario al esperado. Bajo esta misma situación están las personas con dificultades renales o con trastornos de tiroides. Asimismo, es conveniente consultar con un profesional de la salud que determine la cantidad adecuada para el organismo.