La hostelería siempre da para hablar. Cada vez es más frecuente que sus trabajadores denuncien públicamente las diferentes situaciones a las que se enfrentan día a día. Y es que los bajos salarios, las jornadas interminables y los malos tratos por parte de clientes y emperadores son una constante para muchos.
Jesús Soriano, conocido en redes sociales como Soy Camarero, da prueba de ello. Y es que él lleva siete años exponiendo en sus redes sociales los abusos que viven sus compañeros de profesión. Sin embargo, por una vez, Soriano ha pasado a ser tendencia por una anécdota graciosa. Y es que trabajar en la hostelería es exponerse continuamente a situaciones de todo tipo. Y a veces el humor también se hace eco. Así pues, las plataformas web se han convertido en un espacio de comunicación entre clientes y hosteleros y, en consecuencia, también en un nuevo canal en el que ser observador de todo tipo de circunstancias.
La reseña más graciosa de ‘Soy Camarero’
Sin tiempo para las introducciones. En uno de sus últimos videos, Soriano comienza directamente leyendo una conversación entre una clienta y el propietario de un hotel. Así pues, aquí se lee como la primera pregunta tanto por el menú, como por las instalaciones del alojamiento. “Hola soy celiaca habría problemas para el desayuno? Me gustaría reservar para este fin de semana”, escribe. “Y otra cosita, todas las habitaciones tienen terraza privada?”, agrega.
Por su parte, el propietario no dudó en responder sus dudas. Sin embargo, no hizo la interpretación correcta del mensaje. “Buenas tardes celiaca. El desayuno está incluido en el precio de las habitaciones”, comentó. “Todas las habitaciones tienen una terraza privada. Si tiene alguna pregunta más siempre puede contactarme”, añadió.
En esta ocasión, el tono de Soriano era mucho más burlesco que en ocasiones anteriores. De hecho, se le escucha reírse durante varios segundos al final del video. En este sentido, después de una carcajada y tras haber tomado aire, el influencer ha querido preguntar a sus seguidores qué les parece la respuesta del propietario.
Esta vez, las respuestas se dividen en dos: por un lado, están las que comparten el tono de Soriano y se jactan de esta situación. “Parece un chiste de Arturo Valls”, comenta Belén. Del lado contrario, están los que han querido incidir en la importancia de utilizar correctamente los signos ortográficos. “La importancia de las comas”, dice un usuario, “Hola, soy Maria, habría problema para el desayuno ya que soy celíaca. Por ejemplo”, apunta otra.
Por otra parte, también han sido varias las personas que han aprovechado esta historia para compartir las dificultades que tienen las personas celiacas a la hora de comer fuera de casa.
Comer fuera de casa siendo celiaca
Las personas con celiaquía tienen grandes dificultades para comer fuera de casa, ya que su salud depende de evitar rigurosamente el gluten, presente en muchos alimentos. La falta de información clara en los menús y el desconocimiento del personal sobre los cuidados necesarios para evitar la contaminación cruzada son algunos de los principales riesgos. Además, esta contaminación cruzada es especialmente difícil de controlar en espacios de comida rápida. Así pues, contar con opciones seguras y claramente señalizadas es esencial para la inclusión de las personas celíacas.