Los casos de gonorrea aumentan un 42% en España: qué es, cómo se transmite y qué síntomas tiene

En 2023 se detectaron 34.401 casos, siendo los hombres los más afectados por esta infección de transmisión sexual (ITS)

Guardar
Los casos de enfermedades de transmisión sexual continúan aumentando en España (Pixabay)
Los casos de enfermedades de transmisión sexual continúan aumentando en España (Pixabay)

El Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) ha publicado, a través de su Centro Nacional de Epidemiología (CNE), el informe Vigilancia Epidemiológica de las Infecciones y Transmisión Sexual en España, 2023. Los datos del estudio indican que las infecciones de transmisión sexual (ITS) continúan creciendo en nuestro país, algo que se repite desde el inicio de la década del 2000. Se ha observado un aumento en la incidencia de enfermedades como la gonorrea, la sífilis y la clamidia, especialmente en hombres jóvenes.

La gonorrea es una infección causada por la bacteria Neisseria gonorrhoege (también conocida como gonococo). A pesar de los avances en la medida y los intentos por concienciar a la población de la importancia de protegerse en las prácticas sexuales, continúa siendo una infección común en todo el mundo.

Según el informe, entre los años 2021 y 2023, los casos de gonorrea crecieron un 42,6%: en 2023 se detectaron 34.401 casos, lo que ha supuesto una subida de la incidencia del 2,04 en 2001 a una tasa de 71,54 en este año. Las cifras son superiores en hombres, siendo ocho de cada diez positivos. En cuanto a la edad, la más afectada se encuentra en la franja de 20-24 años, seguido de cerca por las personas de 25 a 34 años: en el caso de los varones, la mayoría de infecciones se producen en el grupo de 25-34 años, mientras que en las mujeres es más frecuente entre los 20 y 24.

El estudio del ISCIII ha determinado que la comunidad autónoma con más infecciones es Cataluña (165,3 de tasa de incidencia por cada 100.000 habitantes), seguida de Madrid (94,08), País Vasco (78,37) y Andalucía (58,64). Las zonas con menos infecciones fueron Ceuta (1,20), Melilla (2,34), Aragón (9,24), Castilla y León (12,59) y Extremadura (16,12) en 2023.

Síntomas más frecuentes de la gonorrea

Aunque en muchos casos esta ITS no presenta síntomas, especialmente en las mujeres, hay veces en las que sí se pueden desarrollar.

En el caso de los hombres, pueden presentar micción dolorosa por irritación de la uretra; secreción similar al pus en la punta del pene, siendo uno de los signos más comunes de la gonorrea en los varones; dolor o inflamación de los testículos, en los casos más graves o no tratados, y dolor en la zona pélvica o anal si el infección se ha propagado a través del tracto urinario.

Las mujeres pueden presentar síntomas como el aumento del flujo vaginal, así como una variación en el color, textura u olor, pudiendo ser la secreción amarillenta, verdosa o blanca y tener un olor desagradable; micción dolorosa; dolor pélvico o abdominal bajo, que puede variar en intensidad y ser intermitente o constante; sangrado vaginal entre períodos, o dolor durante las relaciones sexuales, también conocido este signo como dispareunia.

Prevención, detección y tratamiento

La mejor forma de prevenir la gonorrea es utilizar siempre preservativo durante las relaciones sexuales, ya que es una infección de transmisión sexual.

La mejor forma de prevenir infecciones de transmisión sexual es el uso del preservativo (Getty Images)
La mejor forma de prevenir infecciones de transmisión sexual es el uso del preservativo (Getty Images)

Para diagnosticar la enfermedad, es necesaria una muestra de la zona genital, faríngea o anal, dependiendo de las prácticas sexuales que haya mantenido la persona afectada, aunque también se puede evaluar con una muestra de orina.

Una vez se ha detectado un caso positivo, la gonorrea debe curarse con antibióticos y es importante seguir el tratamiento específico cuanto antes, ya que puede presentar complicaciones y graves problemas de salud a largo plazo si no se trata: enfermedad inflamatoria pélvica (EIP), que puede provocar dolor abdominal pélvico, infertilidad y embarazo ectópico; infecciones dolorosas en los testículos, así como en otras regiones del organismo como la piel y las articulaciones, y la transmisión a recién nacidos durante el parto, lo que puede ocasionar una infección ocular grave.

Guardar