El teléfono móvil se ha convertido en un accesorio indispensable en nuestra vida diaria. Ya sea para trabajar, hablar, chatear o entretenerse, el móvil está siempre como una de las primeras opciones a las que poder acudir, incluso muchas veces de manera inconsciente. Es por eso que muchas acciones y comportamientos ocultos salen a la luz a la hora de sacar nuestro teléfono.
Entre la gran cantidad de acciones que se pueden hacer con el teléfono móvil, una de ellas es ponerlo en modo silencio. Puede parecer un simple hábito (cuando entramos a la reunión de trabajo, cuando nos vamos a dormir...), pero este simple gesto puede destapar algunos de los rasgos de la personalidad de una persona.
Tener el móvil en silencio puede aportar pistas sobre cómo se maneja uno con su entorno, espacio personal, tiempo.... Según algunas investigaciones publicadas por varias revistas científicas, las personas que prefieren el modo silencio de su teléfono tienen unas características comunes que pueden hacer entender este comportamiento.
Silencio contra la hiperconectividad
Los dispositivos móviles han transformado nuestra manera de vivir, facilitando las comunicaciones, el acceso a la información y el entretenimiento. Sin embargo, el uso excesivo puede tener consecuencias negativas. Es más, en un estudio realizado por la Universidad de Extremadura, en el que participaron más de 1.200 estudiantes, se observó que el uso desmedido del móvil esta fuertemente relacionado con el aumento de la ansiedad y la depresión.
Debido a esta hiperconectividad que nos ofrecen los teléfonos móviles, muchas personas optan por la opción de mantener el móvil en silencio, lo que ha llamado la atención de algunas revistas científicas como The Science of Personal Space o Journal of Neuroscience, que postulan que tener el teléfono en silencio puede estar relacionado con los siguientes motivos:
- Valorar el espacio personal: estas personas desean controlar las interacciones con su entorno. Así, también ponen límites a los demás y tienen un mayor control sobre sus actividades y tiempo libre.
- Administrar el tiempo: una característica muy común es que estas personas suelen organizar muy bien su tiempo. Lo hacen para que no les interrumpan las notificaciones y poder centrarse mejor en aquello que están haciendo.
- Prestar más atención: estas personas son más conscientes de lo que está sucediendo a su alrededor y quitar el volumen al teléfono les ayuda a mejorar su concentración, según el estudio The Mere Presence of Your Smartphone Reduces Brain Power, Study Shows.
- Menos estrés: el sonido del móvil puede generar ansiedad a algunas personas, por lo que no tener el sonido activado puede ayudar a reducir el estrés.
- Preferir las conexiones interpersonales: valoran mucho más las conversaciones cara a cara. El sonido puede interrumpirles esa conexión profunda y significativa, por lo que quieren mostrar su compromiso con las personas de su alrededor.
- Ser más productivos: el sonido de una notificación o una llamada entrante puede provocar que se interrumpa la conversación. Además, las personas llegan a tardar 23 minutos y 15 segundos para retomar la tarea después de un interrupción, según un estudio de la Universidad de California Irvine.
- Ser conscientes de uno mismo: son personas a las que el ruido constante puede influir en su bienestar y con el móvil en silencio pueden proteger su espacio personal.
- No llamar la atención: estas personas no quieren llamar la atención con el sonido de su teléfono móvil si se encuentran rodeadas de otras personas. Los expertos aseguran que silenciar el móvil es una forma de autoprotección y educación cada vez más habitual en la sociedad.