Con la edad, muchas personas ven mermado su equilibrio y la fuerza de sus huesos y articulaciones. Por ello, las caídas en las personas mayores son más frecuentes. Ahora, un estudio del Brigham and Women’s Hospital de Boston (Massachusetts, Estados Unidos) ha relacionado que los ancianos que sufren caídas tienen más probabilidades de desarrollar demencia al año después del accidente.
Este descubrimiento no implica que las caídas contribuyan a la demencia (aunque no es algo que se pueda descartar), pero sí sugiere que podría tratarse de un indicador temprano de ciertas condiciones cerebrales que conducen a diferentes tipos de demencia, como el Alzheimer. “Es posible que las caídas sirvan como un evento centinela que marca un riesgo futuro de demencia”, explica el doctor Alexander Ordoobadi del Brigham and Women’s Hospital en el artículo. “Los hallazgos de este estudio sugieren que es necesario implementar evaluaciones cognitivas en adultos mayores que sufren una caída lesiva”.
De hecho, las caídas son la causa más común de lesiones en las personas mayores de 65 años, así como son el principal foco de la incidencia de la demencia. Casi 10 millones de personas son diagnosticadas cada año con algún tipo de demencia, más de 40.000 solo en España. Son enfermedades neurodegenerativas que, a día de hoy, son incurables. Los tratamientos se centran en aliviar los síntomas y ralentizar la progresión de la enfermedad.
La investigación, que ya ha sido publicada en la revista JAMA, analizaron a miles de pacientes de registros de Medicare en Estados Unidos que habían sufrido una lesión traumática, diferenciando entre quienes la habían padecido a raíz de una caída o no. Aquellas personas que habían sufrido una caída tenían un 20% más de riesgo de desarrollar demencia al año siguiente al accidente, en comparación con quienes no.
“La relación entre las caídas y la demencia parece ser una calle de doble sentido”, explica la doctora Molly Jarman, del Brigham and Women’s Hospital. “El deterioro cognitivo puede aumentar la probabilidad de caídas, pero el traumatismo provocado por esas caídas también puede acelerar la progresión de la demencia y hacer que el diagnóstico sea más probable en el futuro”, concluye la investigadora.
Los datos del Alzheimer en España
En España, la enfermedad de Alzheimer afecta aproximadamente a 800.000 personas, según los últimos datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN). Es la forma más común de demencia, representando entre el 60% y el 70% de todos los casos de esta condición en nuestro país. La prevalencia de esta enfermedad neurodegenerativa aumenta con la edad, siendo más común en personas mayores de 65 años. Sin embargo, también puede presentarse en individuos más jóvenes, en lo que se conoce como Alzheimer de inicio temprano.
La incidencia de la enfermedad de Alzheimer en España ha ido en aumento en las últimas décadas, en parte debido al envejecimiento de la población. Este crecimiento representa un desafío para el sistema de salud y los servicios de atención a largo plazo, ya que la enfermedad requiere de cuidados especializados y constantes