El papel de aluminio es un elemento indispensable en cualquier cocina, ya que se utiliza principalmente para envolver alimentos y conservar su temperatura. Sin embargo, a pesar de su utilización extendida, existe una confusión común sobre cuál de sus dos lados, el mate o el brillante, debe estar en contacto con los alimentos.
Esto ha llegado a un punto, por el que se han generado diversas teorías y mitos sobre su correcto uso. Y es que, según el medio italiano especializado Bien Etre Centro Benessere, muchas personas creen que, debido a la apariencia bicolor del papel de plata, cada lado tiene un uso específico, o que incluso, solo uno de ellos es adecuado para estar en contacto con los alimentos.
¿Cuál es el lado adecuado para los alimentos?
A pesar de las creencias populares, ambos lados del papel de aluminio tienen la misma funcionalidad. Ya se utilice para envolver alimentos, cubrir platos en el horno o conservar la frescura de los alimentos. De todas formas, esta cuestión se explica con su proceso de fabricación.
Según Noticias de Navarra, cuando el aluminio se presiona para formar una lámina delgada, las dos capas se comprimen juntas. En este proceso, un lado se vuelve brillante al entrar en contacto con un cilindro de acero pulido, mientras que el otro lado permanece opaco.
En consecuencia, sendos lados sirven para conservar la frescura de los alimentos y distribuir uniformemente el calor, lo que lo convierte en un aliado versátil para diferentes métodos de cocción.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que este consejo varía en función del fabricante. Así, la preferencia por el lado mate es relevante en algunos casos. Por ejemplo, en los alimentos delicados como tartas o bollería, para minimizar el riesgo de que se peguen o en el caso de que se vaya a usar para alguna cocción específica.
Usos adicionales del papel de aluminio
Gracias a su superficie brillante y lisa se puede aplicar para limpiar y pulir objetos metálicos como platos, cubiertos y otros utensilios, demostrando así su versatilidad. Esta propiedad es particularmente útil para eliminar la suciedad y devolver el brillo a los metales. Aunque es igual de práctico para otras actividades de la cocina, como la de deshacerse de las placas de hielo del congelador.
Además, esta herramienta incluso permite afilar las tijeras que no corten mucho. Para ello, habría que coger una tira del papel y doblarlo varias veces hasta que aumente su anchura. Después, con las tijeras, se intenta cortar, y así, con cada punzada, quedará más afilada.
Por otro lado, aunque no suele suponer un riego para la salud, existen ciertas recomendaciones del Consejo Europeo sobre metales y su uso cuando entra en contacto con los alimentos. De esta forma, la institución ha aconsejado limitar el almacenamiento de productos líquidos ácidos en papel de aluminio para reducir la liberación de metales. Igualmente, es crucial no meterlo en el microondas, ya que puede provocar chispas e incluso incendios, por la rápida acumulación de energía.