La hostelería en España destaca por ser un sector más que sacrificado. Y es que no hay un sólo día en el que no aparezca un nuevo caso de precariedad o abuso dentro de este trabajo. Así, ante una situación que parece inamovible, cada vez son más las personas que deciden alzar la voz y denunciar los problemas de la profesión.
Jesús Soriano, conocido como Soy Camarero en redes sociales, lleva siete años siendo el máximo representante de los camareros y camareras en España. El influencer comparte diariamente en sus redes sociales las distintas situaciones a las que se enfrentan los trabajadores hosteleros. De esta forma, los horarios interminables, los bajos salarios, las ofertas sin derechos laborales o los abusos por parte de clientes y empleadores son algunos de los principales temas que aparecen en sus perfiles de X, Instagram y TikTok.
En este sentido, ha sido una de sus últimas publicaciones en la res social X la que ha generado una nueva polémica. Esta vez, la indignación se debe a la reacción de una clienta a la decisión de la dueña de un bar.
La última polémica de ‘Soy Camarero’
“Abrir 24/7 porque lo digo yo y punto”, así ha presentado Jesús Soriano a una de las últimas polémicas que ha publicado en sus redes sociales. Con todo ello, y como ya es habitual, a su pequeña afirmación le acompañan dos capturas de pantalla. Esta vez, las imágenes muestran una conversación de WhatsApp entre una clienta y la dueña de un bar.
“Te pido que si tienes algo que decir o criticar sobre el bar lo hagas por mensaje privado y no por el grupo, ya que como dueña del bar la única que se tiene que enterar de las quejas sobre el bar soy yo”, comenzaba diciendo la hostelera. El siguiente mensaje también era suyo. En él se intuye el motivo del conflicto: el cambio de horario de apertura del bar que ella regenta durante una jornada festiva.
“Después de unas semanas muy intensas, hoy vamos a cerrar un poco antes para poder disfrutar de un merecido descanso y un tiempo en familia”, empieza diciendo. “He estado trabajando 14 horas diarias durante el mes y hoy abro durante doce horas, me parece más que suficiente para poder venir al bar y es un día, mañana volveremos al horario habitual”, añade.
Estas explicaciones no parecieron ser suficientes para la clienta, quien afirmó que ella no era la dueña del bar, sino que este era un lugar que pertenecía a todo el pueblo. “Es un centro de reunión”, aseguraba. Además, la clienta remarcó que “agosto es agosto” y que “tiempo atrás podíamos utilizarlo aunque se ausentaran los anteriores”.
La respuesta final de la dueña y la reacción de los usuarios
“La dueña sí soy yo, soy autónoma, pago un alquiler, pongo los productos y las horas de trabajo”, respondió tajante la dueña del bar. Por su parte, los seguidores de Soriano, que han manifestado una fuerte indignación sobre este asunto, han publicado varios mensajes de apoyo a la decisión de la hostelera. “La soberbia de las personas. Más de lo mismo. Yo pago yo mando. Y encima con amenazas. Si sé quién es al bar ni entra y mucho menos comenta”, escribe uno de ellos.