Qué es el hiperandrogenismo, la condición médica que sufre la boxeadora olímpica Imane Khelif a la que acusan de ser trans

Desde la paródica representación de la Última Cena en la ceremonia de inauguración hasta las dudas sobre la salubridad de las aguas del Sena, los Juegos Olímpicos de París están dejando a su paso múltiples episodios repletos de polémicas. El más reciente son las críticas a la boxeadora argelina Imane Khelif, que en solo 46 segundos derrotó a su rival, la italiana Angela Carini. Ahora, parte de la opinión pública exige la descalificación de Khelif, a la que acusan de ser una mujer trans.

A pesar de que Khelif no es una mujer trans (no se tiene constancia de ello), la Federación de Boxeo optó por descalificarla en los últimos mundiales porque las pruebas de ADN “habían probado que tenían cromosomas XY”. Sin embargo, la púgil sí ha superado los requisitos de elegibilidad del COI, que ha salido en defensa de la argelina y ha calificado de “abusos” los ataques que está recibiendo.

La condición de Khelif, así como la de otras deportistas como la también boxeadora Li Yu-Ting, es el hiperandrogenismo, que es una condición caracterizada por niveles elevados de andrógenos (hormonas masculinas) en el cuerpo femenino. Los andrógenos, que incluyen la testosterona, la androstenediona y la dehidroepiandrosterona (DHEA), son producidos en pequeñas cantidades por los ovarios y las glándulas suprarrenales.

Según el Instituto Bernabeu, se trata de un trastorno endocrino que puede afectar a las mujeres de diferentes maneras, provocando una variedad de síntomas y complicaciones de salud. Las causas del hiperandrogenismo pueden ser diversas, aunque las más comunes incluyen el Síndrome de Ovario Poliquístico (SOP), que se caracteriza por la presencia de quistes en los ovarios, ciclos menstruales irregulares y signos de exceso de andrógenos.

La otra causa más común del hiperandrogenismo es la hiperplasia suprarrenal congénita (HSC), un trastorno genético que afecta la producción de hormonas en las glándulas suprarrenales y que puede llevar a una sobreproducción de andrógenos.

El Instituto Bernabeu destaca que los síntomas del hiperandrogenismo pueden variar en intensidad y presentación. En cambio, los más frecuentes en las mujeres con esta condición son el hirsutismo (crecimiento excesivo de vello en áreas típicamente masculinas como la cara, el pecho y la espalda), el acné (especialmente el acné severo y persistente que no responde a los tratamientos convencionales) y la alopecia androgénica (pérdida de cabello de patrón masculino, generalmente en la parte superior de la cabeza).

Otros signos de este trastorno del sistema endocrino abarcan unos ciclos menstruales irregulares o amenorrea (ausencia de menstruación), infertilidad debido a la disfunción ovárica o, en algunos casos, aumento en la masa muscular y una disminución en la grasa corporal.

El diagnóstico de hiperandrogenismo implica una combinación de evaluación clínica y pruebas de laboratorio. La historia clínica y el examen físico son fundamentales para identificar los signos de exceso de andrógenos y suelen realizarse mediante la medición de andrógenos sanguíneos o las pruebas de función ovárica y suprarrenal.

En cuanto a su tratamiento, depende de la causa subyacente y la gravedad de los síntomas, por lo que el Instituto Bernabeu enfatiza un enfoque individualizado para cada paciente. Las opciones de tratamiento más frecuentes son los anticonceptivos y los antiandrógenos. Para el hirsutismo, la depilación láser es una opción eficaz.