Las embarazadas tienen una serie de restricciones alimentarias muy claras para proteger tanto su salud como la de sus bebes, ya que es mejor evitar el consumo de ciertos alimentos para prevenir riesgos que, aunque poco frecuentes pueden tener consecuencias negativas para el feto o la persona gestante.
En este sentido, el Ministerio de Asuntos Sociales, Consumo y Agenda 2030 cuenta con una serie de “consejos básicos para 40 semanas de tranquilidad” entre los que se incluyen desde recomendaciones para la manipulación de alimentos hasta prohibiciones que garantizan que el bebe desarrolle posibles patologías.
Precauciones con algunos alimentos
- Lava las frutas y hortalizas crudas. Puedes utilizar agua con lejía apta para desinfección del agua de bebida (consultar la etiqueta), a razón de 4 gotas por litro de agua. Sumerge las frutas y hortalizas durante al menos 10 minutos y después realiza un enjuagado abundante con agua potable.
- Cocina completamente las carnes hasta alcanzar los 71ºC (debe cambiar de color en el centro del producto)
- Las comidas así como las sobras de comida, no deben consumirse frías. Asegúrate de calentarlas a más de 75 °C.
- Si necesitas algún complemento alimenticio a base de vitaminas y minerales, toma sólo aquellos que te prescriba tu médico.
- Lee detenidamente el etiquetado de los alimentos, especialmente las advertencias y condiciones de uso.
- Modera el consumo de cafeína de cualquier fuente (café, té, bebidas de cola, bebidas “energéticas”, yerba mate...)
Alimentos que debes evitar durante el embarazo
El Ministerio recoge una serie de alimentos que es conveniente no ingerir, entre ellos se encuentran:
- Grandes peces como el pez espada, el tiburón, el atún rojo o el lucio.
- Leche cruda y quesos frescos o de pasta blanda (Brie, Camembert, tipo Burgos o quesos latinos, mozzarella y quesos azules) si en la etiqueta no dice que estén hechos con leche pasterizada. Quesos rallados o loncheados industriales. Quita la corteza de todos los quesos.
- Frutas y hortalizas crudas que no se hayan pelado o lavado y desinfectado previamente (incluyendo ensaladas embolsadas y las consumidas fuera de casa).
- Brotes crudos (soja, alfalfa,...)
- Huevos crudos o preparaciones elaboradas con huevo crudo (salsas y mayonesas caseras, mousses, merengues y pasteles caseros, tiramisú, helados caseros, ponches de huevo...)
- Carne cruda o poco hecha (carpaccios).
- Productos cárnicos loncheados envasados. Estos alimentos sí pueden consumirse después de cocinarse a más de 71ºC (en croquetas, rehogados, pizzas…)
- Si no estás inmunizada frente a la toxoplasmosis (consulta a tu médico) evita el consumo de productos cárnicos crudos curados (chorizo, salchichón, salami, jamón curado…).
- Patés que se vendan refrigerados.
- Pescado crudo (tipo “sushi”, “sashimi”, ceviche, carpaccios), pescado ahumado refrigerado o marinado así como ostras, almejas o mejillones crudos.
- Sándwiches envasados y otros alimentos preparados que contengan vegetales, huevo, carne, fiambres, pescado y derivados.
- Consume sólo zumos recién exprimidos o zumos envasados pasterizados.
- No tomes bebidas alcohólicas.
Alimentos recomendados
Por el contrario, existen una serie de alimentos que se aconseja consumir para tener un embarazo saludable. Inma, una nutricionista que está embarazada y que comparte a través de su cuenta de TikTok (@inmamartinjim) consejos para una gestación lo más sana posible, ha hecho un listado en el que incluye alimentos de distintos grupos que resultan muy beneficiosos.
Los alimentos “clave” que menciona la experta son el pescado azul, como el salmón, la caballa o el boquerón; las semillas como el lino, la chía; los frutos secos, como la nuez de macadamia, la de Brasil, la pecana, las avellanas o las nueces; las legumbres como los garbanzos o lentejas; el aceite de oliva virgen extra; y los vegetales de hoja verde como las acelgas, espinacas, canónigos y rúcula y lechuga.